Un día como hoy hace dos mil años nació Jesús de Nazaret, se supone. Los judíos no creen en Jesús pero creen en Hilel por ejemplo, un rabino de principios de nuestra era que sistematizó cómo interpretar la Torá. Una de sus reglas para eso es Gezerah Shavá. Significa "regulación semejante". Consiste en hacer analogías entre sucesos distintos para extraer conclusiones de ello. La regla se presta a la tergiversación: si comparamos el atentado de las Torres Gemelas con el genocidio de Ruanda la cosa se complica bastante. Un Gezerah Shavá, no sé mucho de esto y me acabo de enterar, también tiene que ver con "el fin justifica los medios".
Hay una conferencia en la Universidad de Waterloo de Norman Finkelstein, un escritor americano, judío, muy crítico con la política de Israel en Gaza. En el turno de preguntas una chica se dirige a él recriminándole que en su discurso calificara a ciertos judíos como nazis, algo ofensivo pues muchos son alemanes y sufrieron o murieron bajo el nazismo. Una especie de Gezerah Shavá, comparar sucesos distintos. La muchacha hasta se emociona con su propia intervención y se echa a llorar. En medio de sus sollozos Finkelstein le responde:
"No respeto eso. Ya no. No respeto las lágrimas de cocodrilo. No me gusta emplear ante una audiencia la carta del Holocausto, pero ahora tengo que hacerlo".
Eso hace que se monte un escándalo mayúsculo en el público con silbidos o aplausos y Finkelstein tiene que hacerse oír por encima del barullo gritando "¡por favor, déjenme acabar!". Cuando por fin lo dejan hablar se dirige otra vez a la muchacha:
"Cállate. Mi difunto padre estuvo en Auschwitz; mi difunta madre en el campo de concentración de Majdanck. Todos los miembros de mi familia fueron exterminados. Mis padres estuvieron en el ghetto de Varsovia. Y precisamente por la educación que me dieron ellos no callaré sobre los crímenes de Israel contra los palestinos. Y no se me ocurre nada peor que utilizar aquel sufrimiento y aquellos asesinatos para justificar la tortura, la brutalidad y la destrucción de hogares que Israel está llevando a cabo en Palestina. Me niego a ser intimidado por las lágrimas. Si tienes corazón llora por los palestinos, no por los otros."
El pasado verano, tras una comida en Poio en casa de un amigo, salió el tema de Gaza. Me sorprendió que algunos/as hicieran análisis no digo prosionistas, pero justificatorios de la postura de Israel. Así que decidí hacer yo también Gezerah Shavá:
Sí, Hamás es una organización terrorista, Amnistía Internacional y Human Rights la definen así. Pero Hamás lanza un misil de vez en cuando, los palestinos ni siquiera tienen ejército, viven en la indigencia. Israel tiene uno de los ejércitos más poderosos del mundo. Los análisis no sirven aquí. Lo único que sirve es: ¿de qué lado os queréis poner, del de las víctimas o del de los poderosos?
Yo creo que si Jesús naciera hoy, nacería en Gaza.
