La sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que obliga a la justicia española a devolver la pasta de la multa a los dos chavales de Gerona que quemaron unas fotos de los reyes de España a mi me parece bien. Todo sea por la libertad de expresión. Además, quemar fotos de reyes no tiene ninguna importancia, lo malo sería quemar reyes vivos; eso sí que estaría mal. Pero ¿qué más da quemar unas fotos de Felipe VI y doña Leticia? Sería igual que quemar unas cuantas cartas de la baraja, las de los reyes de copas, oros, espadas y bastos, por decir algo. No tendría ninguna trascendencia salvo que después, tristemente, no podríamos jugar bien al tute. Eso también estaría mal.
La sentencia de todas formas no aclara que sea libertad de expresión quemar fotos de reyes españoles pero no lo sea quemar fotos de reyes belgas, holandeses, luxemburgueses, daneses, suecos, ingleses, etc. Que por ahí, Europa adelante, tienen todos muchos más reyes que nosotros, aunque los europeos los tengan a todos debajo de la alfombra. Los nuestros por lo menos se dejan ver.
De todas formas quemar fotos es una estupidez de campeonato, una idea demencial que solo se le puede ocurrir a un perfecto ignorante. Eso lo sabe cualquier aficionado a la novela o al cine negro o a las series de detectives o a la fotografía. ¡Hay que quemar los negativos, coño!, con perdón. Y digo con perdón porque los negativos desde el principio de la digitalización de la fotografía ya no existen. Ahora todo es positivo. Solo positivo.
A mí también me gustaría quemar las fotos de unas cuantas personas, pero no lo hago porque llenaría mi casa de humo y teniendo en cuenta lo que fumo el techo y las paredes ya están bastante ahumados. Más no, por favor.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos, TEDH, un nombre que casi suena como si fuera una conferencia TEDX, ha dictado una resolución más que razonable. Yo también creo que la sentencia de los tribunales españoles era excesiva y absurda. Por eso aquí va una lista de fotos de gente a quemar y a mi juicio, en ningún caso debería ser castigado nadie por dicho acto, ni con multa ni con cárcel:
Rajoy, Puigdemont, Pedro Sánchez, Pablo Iglesias, Albert Rivera, Cristina Cifuentes, los obispos de España casi sin excepción, todos los imanes del mundo, Trump, Putin, Kim Jong-un, los presentadores y tertulianos del Canal 13 y la Cope, los hermanos Cohen (en mi vida he visto a unos directores de cine más sobrevalorados que esos dos chicos, en este caso también estaría bien quemar sus películas), Oriol Junqueras y los Jordis, Iñaki Urdangarín y señora, el ex rey don Juan Carlos, Zapatero, Alberto Garzón, Esperanza Aguirre, la mayoría de los actores de "Aquí no hay quién viva", Aznar, Artur Mas, Rubalcaba, Ada Colau, Jordi Pujol, Gabriel Rufián...
Vale, lo dejo. Me he quedado sin gas en el mechero. Ciao.
