El comercio de Celanova abre en festivo para rentabilizar el turismo

Un sí rotundo a mantener los mercados en día festivo fue la respuesta unánime de comerciantes y feriantes ayer en Celanova, que vivió un concurrido jueves de sol y compras coincidiendo con la festividad de Santiago. Tras un año “flojo” en ventas y un verano con una climatología atípica, tal y como trasladaban desde el sector local, una parte del comercio local quiso aprovechar el tirón de los veraneantes y secundar la feria con una apertura parcial.

“Estamos de vacaciones y hemos venido por el mercado. ¿Comprar? bolsos y joyería”

La decisión, respaldada desde el Concello y por los feriantes, fue secundada por la clientela habitual, veraneantes que ya están disfrutando de unos días de vacaciones por la zona y también visitantes llegados desde otros puntos de la provincia como Maside, Bande, Ourense o Xunqueira de Espadanedo. “Está muy bien que mantengan la feria en festivo, y que el comercio lo respalde abriendo sus puertas, es una forma de que la gente pueda disfrutar con mayor libertad, comprar…”, comentaba Luis Rodríguez, jubilado celanovés y cliente habitual del mercado semanal que ayer vio multiplicada su afluencia. “Venir los jueves a Celanova es una tradición y siempre compras algo”, comentaba Rosa Domínguez, madrileña que veranea en Quintela de Leirado.

En la conocida como calle del Paseo, Ramón Moreno, de Rafa Complementos, señalaba que “el mercado de Jueves Santo, si el tiempo acompaña, y los que coinciden ahora en esta quincena, son sin duda los más fuertes del año, caigan o no en festivo”, dijo sobre una afluencia que repercute positivamente en el comercio, que ve incrementadas las ventas. Una opinión que compartía también Salomé González de Pillabáns, tras una intensa mañana de ventas. “A ver que pasa en agosto”, dijo ante una quincena donde se prevé un incremento de población con las celebraciones locales.

“Es una manera de aprovechar el día festivo y conocer un poco más Celanova”

El tirón de los turistas y veraneantes lo notaron también los feriantes, quienes desde la calle Rosalía de Castro hasta la Alameda, pasando por la Maior, registraron un aumento de ventas con respecto a cualquier otro jueves. Así lo señalaba Paula Oliveira, que lleva un año acudiendo al mercado celanovés con artículos de decoración “al coincidir en festivo, siempre atrae un poco más de gente”, dijo destacando también el gasto de los veraneantes