Rebeca Rods, una voz gallega con auténtica alma

Rebeca Rods
photo_camera Rebeca Rods
La fuerza del góspel se contagia cuando se escucha a Rebeca Rods. Es inherente a su voz, que desprende una gran energía que sale de su alma, cuando canta y habla

Acaba de culminar uno de sus sueños. Cantar en el Madison Square Garden de Nueva York. Allí actuó la noche del pasado día 2, en el descanso del partido entre los Nicks y los Indiana Pacers, de la NBA, con The New York City Gospel Choir, dirigido por Markanthony Henry. Cantante, compositora, arreglista, productora, Rebeca Rods (Vigo, 1981) dirige cinco coros y su propia escuela coral. A pesar de su juventud tiene una dilatada carrera en la que ha trabajado para grandes figuras del panorama musical como Miguel Ríos, Raphael, Alejandro Sanz, Laura Pausini, por citar tres de una larguísima lista.

¿Cuándo pensó en dedicarse al mundo de la música?

Creo que es algo que no se piensa, se siente. Yo canto desde que puedo recordar. Es cierto que vengo de familia de músicos, así que considero que lo llevo en la sangre. Fue algo que surgió de manera espontánea y creo que aprendía hablar y a cantar a la vez y a los ocho años dije que quería dedicarme al mundo de la música y empecé a compaginar los estudios musicales con el resto de mis actividades. Primero en el conservatorio superior de música de Vigo, con una profesora de técnica vocal y ya cuando acabé el bachillerato, me vine a Madrid e hice magisterio musical en la Complutense.

Su contacto con el góspel ¿cuándo llega, en ese momento cuando ya está en Madrid?

Yo ya llevaba buscando el góspel desde siempre. No sé muy bien por qué, porque aquí no existe esa cultura afroamericana basada en esa fe. Pero de toda mi vida escuchando grabaciones de grandes referentes de ese género como Aretha Franklin, Whitney Huston, las primeras grabaciones de Mariah Carey, cuando empezó a fusionar empezó a fusionar la música pop con ese sonido de góspel y los grandes coros. Cuando llegué a Madrid tenía claro que quería dedicarme eso, hacer mi propia música, componer, trabajar con coros con ese sonido y así fue como comencé.

Al mismo tiempo trabajó para grandes artistas.

Mis trabajos como arreglista, cantante de sesión comenzaron nada más llegar a Madrid. Yo compaginaba mis estudios con ese trabajo. Así trabajé en la primera edición de Operación Triunfo. Bueno y ahora participo profesionalmente en La Voz como arreglista de los coros. En aquellos primeros tiempos los productores necesitaban canciones y una persona que después de producir un tema les cantase una guía para que luego el artista lo hiciese de acuerdo con esa guía … empieza a sonar mi nombre entre los productores fuertes del momento, empiezan a llamarme de los estudios y así fue como me hice fuerte como cantante de estudio.

¿Y esa época arrancó también con el primer coro de góspel?

A la vez de toda esa actividad profesional, también trabajaba con Inside Voices, un coro de góspel que dirigía la gran Sheilah Cuffy, hasta que ella se fue a vivir fuera y entonces monté, hace ya quince años Black Light Gospel Choir.

¿Cómo encaja el góspel aquí en España?

Hoy hay un auténtico boom, tanto nacional como internacional. Pero cuando yo empecé a interesarme poca gente sabía lo que era. Había alguna que otra propuesta, coros evangélicos, después de Inside Voices empezaron a surgir algunos, como el Black Light, empezamos a hacer talleres internacionales, y es una música con tanta energía que el público se engancha. De repente salió “Sister Act” y la gente empezó a percibir que en las iglesias se hacía otro tipo de música y a base del trabajo de los directores de coros de góspel de todo el país que nos hemos empleado a fondo para dar a conocer el género y el estilo la gente se ha ido enganchando y no solo como público en los conciertos sino también a cantar en los coros.

Además del Black Light Gospel Choir, tiene usted una escuela coral en Madrid y ha creado otra en Vigo. ¿Cómo surgió?

Gracias a los conocimientos que ha adquirido a través de mi mentor Markanthony Henry que es el director del New York City Gospel Choir empiezo a viajar a Nueva York y empiezo a recibir muchas llamadas para hacer talleres internacionales y cuando haces talleres de góspel la gente se queda con esa semilla y a partir de ahí yo los animo a que sigan, porque el coro ya está y así empecé, haciendo talleres y también hice en Vigo, porque quería mantener el vínculo con mi tierra. El coro de Vigo nace de una serie de talleres que hice en un barco que se llamó “góspel a vela” con salidas en un velero, a mi me gusta mucho navegar, llevaba el piano y reunía gente que quería cantar y así empezó. En septiembre de 2022 empecé oficialmente con Vigo Gospel Choir.

Rebeca Rods
Rebeca Rods

Además de componer, cantar, hacer arreglos, dirigir coros, formar como coach vocal, también ha hecho doblaje.

Hice, sobre todo para Disney Pixar. Comencé doblando las canciones en versión español y arreglando coros y terminé haciendo mis pinitos como actriz de doblaje en películas como Toy Story 3, Brave, Sophia the first. Es una magia especial, hacer doblaje en películas de animación.

¿Cómo fue la experiencia del Madison?

Yo fui a Nueva York hace catorce años a encontrar el porqué de esa llamada de la música góspel. No es algo que surgiera de nuevo. He cantado en todas las iglesias que son los verdaderos centros de esta cultura musical. El año pasado estuve grabando un tema con ese mismo coro para mi nuevo disco que espero que salga este otoño y lo cierto es que todo fluyó muy orgánicamente, me sentí como en mi casa. Yo supe que iba a actuar allí dos semanas antes y en diciembre, cuando todavía ni me lo imaginaba, en el especial de Navidad de Carlos Herrera en la Cope me preguntó cuál sería el escenario del mundo en el que me gustaría cantar y yo le dije, sin dudarlo, “En el Madison Square Garden”. Fue una experiencia que sentí con mucha emoción y al mismo tiempo una gran serenidad. Fue un sueño cumplido. Es un lugar con magia en el que han actuado los más grandes.

Eres una artista con una carrera consolidada, ¿qué le dirías a los que empiezan?

Me gustaría destacar aunque las cosas no siempre suceden cuando uno quiere, trabajando duro los sueños se pueden cumplir.

Te puede interesar