La empresa aseguró que los hechos no afectarán a los plazos de apertura
Las intalaciones del Matadero de Carballiño S.L., actualmente en obras desde el pasado mes de febrero, sufrieron dos robos en el último mes. Los bienes sustraídos se corresponden con cobre procedente de tuberías y varios lavaderos manuales propios de fábricas industriales. Según aseguró el representante y uno de los socios de la empresa adjudicataria, Emilio Pedro González, la cantidad de los daños asciende a 20.000 euros. Desde que sucedieron los hechos, la empresa contrató medidas de seguridad para "evitar daños mayores".
"Parece que nos están tomando el pelo. Vienen a las instalaciones a plena luz del día y hacen agujeros en la valla para entrar a robar por la noche", aseguró el representante, destacando que "parece que la gente está acostumbrada a que estas cosas pasen aquí, y esto es una pena". La empresa afirmó que, a pesar de lo sucedido, las obras seguirán su curso.
La mejora de las infraestructuras supondrá la puesta en marcha de nuevo de un servicio que está inhabilitado desde 2012, cuando un incendio provocado por una explosión en la caldera obligó al cierre del matadero. El proyecto asciende a un presupuesto de 1,1 millones de euros entre obra civil y maquinaria y se efectuará en dos fases. La primera de ellas, en proceso, consiste en la reparación completa de la zona de trabajo actuando en una superficie de 1.600 metros, permitiendo que comience a funcionar en el mes de junio, mientras se realiza la segunda fase.
