El Concello de O Barco es el más afectado de la provincia con 33 positivos y mantiene el descenso
El concello de Vilariño de Conso registró esta misma semana un brote que afecta a siete personas vecinas del núcleo de Castiñeira, como confirma la alcaldesa, Melisa Macía. El municipio terminó el mes de septiembre sin casos, pero el pasado martes se detectó el primer caso que se extendía a otras seis personas. La regidora da por “cerrado” el brote, ya que todos los contactos se sometieron a una prueba PCR.
Los contagiados “están ben”, según Macía, confinados en su casa a la espera de evolución. La alcaldesa vincula el tiempo de vendimia o de la recogida de la patata a los casos del último mes. Además, lamenta que “imos ao revés de Galicia”. El municipio registró su primer positivo de la pandemia el pasado mes de mayo, con el contagio de un vecino que realmente no reside en Vilariño. Desde entonces, los contagios se han sucedido. En verano, con un perfil más joven, y ahora con personas de “mediana idade”.
Estos casos incidieron en el pequeño aumento que experimentó el área sanitaria en esta semana, pero no es suficiente para cambiar la tendencia estable. Ayer los contagios descendieron nuevamente y las hospitalizaciones permanecen sin cambios con una persona en planta y otra en UCI. La incidencia sigue a la baja, aunque continúa muy por encima de las registradas en otras áreas sanitarias, que se sitúan por debajo de los 25 casos por 100.000 habitantes que marca la nueva normalidad.
Por municipios, O Barco es el más afectado de la provincia con 33 personas contagiadas. La ciudad le sigue con 25 y son los únicos que superan la decena de casos activos.
