Desde la empresa Villoria de Electricidad son claros: la falta de mano de obra “afecta a la hora de ejecutar los trabajos, que no se pueden realizar por falta de personal cualificado, obligándonos a renunciar a presupuestos y trabajos”. Además, ponen el foco en la formación, apuntando que los jóvenes deberían “hacer prácticas desde primer curso”, y que “la mayor parte de la formación corre a cargo de la empresa para adquirir los conocimientos necesarios para el desempeño del puesto de trabajo”.
Indican también que las empresas que más sufren la carencia son aquellas más pequeñas o los autónomos, ya que sus recursos son más limitados. Por último, señalan que “sin buenas expectativas, no hay motivación; parte de la gente que viene de las nuevas generaciones no tiene interés ni motivación por trabajar o luchar por un trabajo propio”.
