Las piscinas de Monterrei sí abrirán este año y lo harán ya con la primera fase del parque acuático en marcha. La fecha de apertura del recinto está preparada para el 20 de junio y se extenderá hasta el 15 de septiembre. Para asegurarse la apertura del espacio, este año la Xunta ya ha licitado, por la vía de urgencia, la gestión del recinto, por el que pagará casi medio millón de euros, y por el que compiten tres empresas, una de ellas ourensana.
Saudeter, con sede social en Verín, es una de las aspirantes a hacerse con el contrato para gestionar el complejo acuático. Sus dos rivales son Offshore Special Services, con sede en A Coruña y que optó ya el año pasado, y Osventos Innovación en Servizos, con sede en Santiago, que gestionó en 2023 la apertura parcial de las piscinas.
Las obras del parque acuático tuvieron un sonoro retraso en los últimos años, después de que renunciase la primera empresa y abandonase la obra por el alza de materiales. Actualmente, están en un estado avanzado, con los toboganes ya colocados, lo que ha permitido sacar a concurso ya la gestión y asegurar la apertura para este próximo verano.
Condiciones
Según los pliegos del contrato, la empresa deberá contar con 15 socorristas, de los cuales 9 deberán estar al mismo tiempo. Habrá un socorrista en la parte alta del gran tobogán y dos abajo, uno en la piscina del embudo y otro en las piscinas donde acaban su recorrido los tres toboganes en seco. Otros dos vigilarán la zona de splash infantil, así como el tobogán de esa misma zona. Además, será necesario contratar a 21 personas para mantenimiento y limpieza.
La franja horaria de apertura del parque acuático será de 12,00 a 21,00 horas, de lunes a domingo, del 20 de junio al 15 de septiembre.
Cabe recordar que este verano solo estará finalizada la primera fase de este parque acuático, ya que este complejo se articula en varias que se harán posteriormente. Esta primera fase contará con cuatro toboganes y una zona infantil. Para construir el parque acuático se han demolido las pistas deportivas antiguas situadas al lado de las piscinas.
El proyecto incluye un nuevo aparcamiento, como nexo de los dos existentes, que dará acceso a una plaza en la que se ubicará el edificio principal de servicios del complejo. Ahí están la taquilla, las oficinas o los vestuarios.
Así es la nueva zona
La zona infantil, próxima al acceso, es la “antesala” del parque acuático. Esta zona tiene un castillo de agua, con torres y plataformas que se unen mediante puentes y pasarelas y dan acceso a toboganes o rampas. En ellos hay juegos de agua como chorros, surtidores, cortinas… También en esta zona infantil hay un “área splashpad” de juegos, una zona semihúmeda con cañones de agua, cortinas, chorros, géiseres, un túnel de agua, cúpulas acuáticas o campanas de agua invertidas.
En la zona para todos los públicos se han habilitado piscinas y toboganes. Tiene cuatro nuevos toboganes con hidrofrenada y una torre de salida común. Hay una piscina de olas, y el resto de piscinas se han adaptado a uso familiar.
Salvo el tornado, todos los toboganes tienen 70 metros de longitud. Uno es de hidrotubo abierto, donde se intercalan trazados de pendiente dulce y otras más rápidas, para todos los públicos. Hay un hidrotubo cerrado, que combina bucles y ondulaciones con altas pendientes, más “excitante”. También un “black-hole”, tubo con flotadores biplaza. Y ya por último, el “spacebowl tornado”, tobogán especial cerrado tipo tubo con un corto (25 metros) pero veloz recorrido que desemboca en un embudo. En la siguiente fase se prevé la instalación de un quinto tobogán.
