El excedente de vino de la DO Ribeira Sacra podrá aprovecharse gracias a la destilación de crisis

El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, anunció este lunes la aprobación de una serie de medidas para apoyar a la Denominación de Orixe (DO) Ribeira Sacra ante las dificultades generadas por los excedentes del vino.

En torno a 400 viticultores de la DO Ribeira Sacra no tienen contrato garantizado debido al exceso de vino acumulado, una situación que se viene arrastrando desde la pandemia, y que la Xunta apunta que “se está viviendo en el conjunto de regiones vitivinícolas ante el descenso generalizado de consumo de vino tinto”.

Para atajar esta situación, el Ejecutivo gallego ha detallado varias actuaciones en el marco de un amplio paquete de apoyo a la DO Ribeira Sacra en particular, así como al sector vitivinícola gallego en general, que se implementarán mediante un paquete de ayudas que se publicarán antes de final de año.

Tendrá dos grupos como destinatarios, según el sistema de cultivo utilizado. Uno de ellos será para el cultivo en bancales, con muros de piedra y que realizan el trabajo de manera no mecanizada, y el segundo, para otros tipos de cultivo del viñedo, sin bancales o mediante trabajo mecanizado.

De entre las 1.300 hectáreas inscritas en la DO Ribeira Sacra, aproximadamente 700 estarían dentro del primer sistema anteriormente mencionado, para el que se destinarán 1,4 millones de euros; y 600 hectáreas en el segundo, con una inversión de 600.000 euros. Por tanto, el importe total para esta ayuda ascenderá a los 2 millones de euros.

En las próximas semanas, el Diario Oficial de Galicia (DOG) publicará ayudas “para la destilación de crisis”. Estará dotada con un presupuesto inicial de 500.000 euros, ampliable, de ser necesario, hasta los 2,4 millones de euros de fondos propios, cantidad comunicada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación como cifra máxima para esta medida.

También se contempla una ampliación de la formación y divulgación de las oportunidades que ofrece la Política Agraria Común (PAC) para los viticultores en general, y en especial para los de la Ribeira Sacra.

Otra acción más de apoyo, a través de la Consellería de Economía e Industria, son las ayudas para que los bodegueros puedan acceder a préstamos de cara a la recogida de uva.

Conservación del paisaje

Además, se destinarán un total de 2 millones de euros para conservar el entorno paisajístico especial y característico de esta zona, con el fin de luchar contra la erosión de sus viñedos en bancales.

Estos protagonizan la conocida como viticultura heroica, que juega un papel fundamental en la actual candidatura de la Ribeira Sacra a Patrimonio Mundial de la Unesco.

Desde la D.O. consideran que las medidas van “na boa dirección”

Las ayudas y medidas presentadas ayer por la Xunta de Galicia para paliar la crisis en el vino derivada del descenso en la demanda van dirigidas en especial a la D.O. Ribeira Sacra, donde existe el temor de que se pierda parte de la cosecha.

Desde el primer momento, el Consello Regulador de la Denominación de Origen (C.R.D.O.) Ribeira Sacra manifestó que defendería los intereses de los viticultores, en busca de “axudas excepcionais” para evitar que una cantidad considerable de uva no se recoja.

Su presidente, Antonio Lombardía, afirma que “algunhas destas medidas levabamos máis dun ano buscando que se fixeran realidade, como pode ser a destilación de crise”. Asimismo, el presidente de la D.O. también había puesto el énfasis en la “búsqueda da singularidade e a conservación desta paisaxe e deste Bien de Interés Cultural (BIC)”.

Por todo ello, Lombardía cree que se están tomando medidas “que van na boa dirección para que todo isto teña un futuro”, pero al mismo tiempo reconoce que “loxicamente mellorar a situación actual parece complicado, pero si nos deixa ver un futuro máis esperanzador nos próximos anos”.

Además, el presidente también reconoce que el Consello Regulador “ten que tomar decisións encamiñadas a que, polo menos o ano que vén, xa teñamos un equilibro maior entre a oferta de uva e a demanda que teñen as propias adegas para a súa elaboración”.

Valdeorras fue la primera de Galicia en vendimiar

La Denominación de Origen (D.O.) Valdeorras puede presumir de haber sido la comarca más madrugadora en empezar la vendimia no solo en Ourense, sino también en Galicia.

Este año además el Consejo Regulador de la D.O. celebra el 50º aniversario del Plan Revival (Reestructuración de Viñedos de Valdeorras), responsable en buena medida del crecimiento de su sector vitivinícola y de la recuperación de la variedad godello.

El pistoletazo de salida en el territorio le correspondió a la bodega Valdesil, que comenzó los trabajos de recogida en la viña As Chas Vieja, ubicada en Portela de Vilamartín. El motivo de empezar tan temprano en la campaña se debe a que la uva cosechada, la godello, se empleará para la elaboración de vino tostado, un clásico que siempre gozó de “mucho prestigio”.

Santiago Pérez, técnico de la DO, anticipaba entonces una cosecha 2024 “histórica e ideal”, gracias en buena medida a “una maduración más progresiva que la del año pasado” y a una climatología que, al igual que en el resto de la provincia, ha sido muy favorable.

La importancia del godello en Valdeorras es tal que esta variedad supone el 65% del total de la Denominación.

O Ribeiro comenzó una campaña más “uniforme”

Tras Valdeorras, la Denominación de Orixe (DO) Ribeiro fijó por primera vez una fecha oficial para el inicio de la vendimia, que arrancó el pasado 26 de agosto de forma “tímida”, con apenas unas pocas bodegas que no recogieron grandes cantidades y que se centraron en viñas concretas.

El primero en vendimiar fue el cosechador Carlos Lorenzo, de Adega do Demo, en la localidad de Alongos, Toén, quien vendimió en los dos primeros días en torno a 2.000 kilos de una estimación total, en su caso, de 40.000.

No obstante, se espera que esta semana dé comienzo la vendimia en la comarca de forma generalizada, en una campaña cuya producción se prevé más “uniforme”, sobre todo porque el impacto de la plaga del mildiu no ha sido tan importante, tal y como señaló Luis Manuel Vázquez, gerente del Consello Regulador.

Vázquez también añadió que se espera que la cosecha 2024 sea de una calidad “excelente”, y que será a partir del 9 de septiembre cuando abran la gran mayoría de bodegas. Por el momento no hay estimaciones sobre la cantidad total que se cosechará, pero como referencia, el año pasado se recogieron un total de 11,5 millones de kilos de uva.