Análisis

¿Y los guardianes del tiempo?

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photo_camera Gonzalo Pérez Jácome, alcalde de Ourense, en una de sus comparecencias (ÓSCAR PINAL).
Jácome prometía revolucionar los tiempos del Concello, pero 2020 se fue y con él decenas de plazos que el alcalde se había autoimpuesto y que ya no podrá cumplir. Y el tiempo es lo único que no vuelve

El alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, sigue siendo víctima de sus propios plazos. Aunque con el avance de los meses y su situación de minoría absoluta al frente del Concello ha pisado el freno en el anuncio de promesas, sigue sin conseguir que su entramado de gestión, engrasado por el city manager, cumpla los objetivos que él mismo, personalmente, asume con los ciudadanos. Y todo ello pese a que en verano había anunciado unos "guardianes del tiempo" que vigilarían los plazos municipales, que parecen, en caso de existir, no haber encontrado todavía la eficacia esperada.

Últimos plazos expirados

Uno de los últimos plazos en vencer fue el de las ayudas a autónomos, que anunció con intensidad en marzo, prometió ya para abril y acabaron llegando en diciembre a las cuentas de muchos profesionales por cuenta propia, el último plazo que se marcó. Sin embargo, a mediados de enero todavía faltaban decenas de ayudas por ser abonadas. A esto se suman los retrasos en el anuncio de un encendido navideño que postergó hasta en dos ocasiones y, aunque no sea atribuible al Concello, la reapertura del pabellón de Os Remedios, que llegó a anunciar para el 7 de enero, con infructuoso resultado. 

La vieja cárcel, verano de 2020

Por el camino siguen quedando muchas promesas en el tintero. Una de ellas es el proyecto para dotar de un nuevo uso a la vieja cárcel de Ourense, en la rúa do Progreso. El 8 de mayo, Jácome aseguraba que se decidiría su uso "este mismo mes de mayo" y que se licitaría "en verano" para ser inaugurado "en 2022", incluso como hotel de lujo termal. En este caso, el único plazo no incumplido en este caso sería el último, por ahora.

Parque mapamundi, en 2020 

Poco más se supo de otros proyectos anunciados, como el aparcamiento disuasorio de 600 plazas al lado de la rotonda de As Lagoas, que se avanzó en abril y del que pocos detalles más se desvelaron, al igual que el "parque mapamundi", anunciado a finales de 2019 y cuya construcción "se empezará en 2020", algo incumplido.

Parque termal, junio de 2020

Uno de los plazos que se atrevió a dar en mayo eran sobre el parque acuático "termal indoor" del campo da Feira. "Se decidirá este mes de mayo y el anteproyecto en junio de 2020", anunciaba hace seis meses. Poco más se supo.

Soterramiento, octubre 2020

Tampoco se cumplieron los plazos avanzados para el soterramiento de la plaza de Concepción Arenal: "Se realizará el anteproyecto este mes de mayo, saldrá a contratación pública en octubre de 2020 y tardará dos años", anunciaba.

30 ingenieros más en el Centro de IA, diciembre de 2020

Uno de los proyectos estrella de Jácome y que consiguió poner en marcha –a costa de laminar La Molinera–  es el Centro de Inteligencia Artificial, también víctima de los tiempos. En verano se prometía incorporar "outros 30 enxeñeiros en decembro", de cuyo nombramiento nada se sabe. Actualmente, su equipo está formado por las ocho personas con las que echó a andar. 

 “En breve" la plaza de A Ponte

También está pendiente de resolver aquel "en breve" que dijo a finales de marzo cuando le preguntaron por los plazos para reabrir la Plaza de Abastos de A Ponte. En mayo, culpó al estado de alarma de parar una licitación inminente que tampoco llegó después. 

Escaleras mecánicas para ser licitadas en diciembre 2020

Siguen pendientes por colocar las cámaras que iban a vigilar el Casco Vello y también la retirada de los mupis, cuya publicidad quitó en noviembre, al vencer el contrato, pero con los soportes todavía en pie. O el misterioso caso de los nuevos contenedores semisoterrados que nunca llegaron a pasar de dos calles, pese a que Jácome dijo que "en verano de 2020"estarían en marcha obras de reemplazo de todos. 

Tampoco se sabe en qué quedo el censo de personas sin techo que se iba a elaborar a principios de noviembre y estaría listo la semana siguiente. En el recuerdo sigue la promesa que Jácome hizo en mayo de que las escaleras mecánicas estarían licitadas "este año". Decía que esperaba adjudicar 10 proyectos de escaleras en diciembre de 2020. 

Un tetris atascado desde el inicio

El 7 de mayo, cuando la desescalada acababa de iniciarse, Jácome dio una rueda de prensa para explicar lo que él denominó el "tetris" de Ourense, citando plazos, como algunos de los señalados, y otros que también han sido completamente laminados. Entre ellos, multitud de piscinas repartidas por los barrios, desde Barrocás hasta O Couto, de la que no se conocieron más detalles. Sí que se dieron más datos, a finales de mayo, de la construcción de una piscina infinita en Covadonga, que se comenzaría a construir en 2021, según Jácome, y de la que nada se ha vuelto a conocer. La idea era que ya esta primavera las obras estuvieron en marcha. Unos plazos que está muy lejos de poder hacer realidad. 

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