La inflación en Ourense baja al 3,3% en octubre pero el precio de los alimentos sube

La provincia de Ourense registra una bajada de los precios en octubre. La tasa interanual descendió ligeramente hasta el 3,3%, 0,2 puntos por debajo de la de septiembre. La inflación en Ourense se sitúa por debajo de la media española (3,5%) y de la gallega (3,6%).

Esto no significa que los precios hayan caído en los últimos 30 días. De hecho, se han incrementado. El Índice de Precios de Consumo (IPC) mensual ha subido un 0,6%, después de que en septiembre experimentase un descenso del 0,1%, según los datos definitivos publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Encarecimiento de la cesta de la compra

Los precios de los alimentos repuntan en octubre. La tasa interanual subió al 10,8%, 0,6 puntos más que en septiembre.

Pero si analizamos la evolución mensual, entre septiembre y octubre, el incremento ha sido más acentuado, del 2,3%, después de que en el noveno mes del año cayesen un 0,3%.

El calzado y la ropa, gran subida mensual

En valores mensuales, los precios del vestido y calzado subieron más de un 6%.

Por su parte, los gastos relacionados con la vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles cayeron un 0,7%.

Galicia, por encima de la media española

En Galicia, el IPC aumentó un 0,3% en octubre en relación al mes anterior, como la media, pero la tasa interanual registró un descenso de una décima, hasta situarse en el 3,6%, que sigue estando ligeramente por encima de la media (3,5%).

En valores anuales, alimentos y bebidas no alcohólicas se anotan la mayor inflación anual en la comunidad gallega, del 9,9%; mientras vivienda baja otro 9%.

En cuanto a la evolución mensual, los precios del vestido y calzado son los que más suben en Galicia, ya que lo hacen un 10,8%, y ocio y cultura los redujeron un 1,2%.

En España, los precios se mantienen

En España, el IPC aumentó un 0,3% en octubre en relación al mes anterior y mantuvo sin cambios su tasa interanual en el 3,5%, debido a que el encarecimiento de la electricidad y del gas se vio compensado por el abaratamiento de los carburantes y por una subida menos intensa en los precios de los alimentos.