No se había visto los ríos tan llenos en Ourense desde febrero de 2016. Las lluvias continuadas de los últimos días han puesto al límite la capacidad de los cauces –desbordados en muchos puntos– y los embalses, actualmente hasta 30 puntos por encima de su media en esta época del año. En la ciudad, cayeron casi 100 litros por metro cuadrado en los últimos cinco días, y en zonas de la provincia como la Serra do Invernadoiro, en Vilariño de Conso, se registraron hasta 130 l/m2 en solo 24 horas. A Mezquita marcó el máximo en lluvias este lunes, con 50 l/m2.
Esta cantidad de precipitaciones, sumada a la que prácticamente de forma continuada cae desde el inicio de octubre, ha provocado que los suelos estén "saturados" y no filtren.
El río Miño en la ciudad anegó por completo los paseos de sus riberas, así como las instalaciones termales, y superó el nivel de 7 metros de altura, (hasta 7,33) tras crecer en 4 horas más de 2 metros. No solo eso, sino que el caudal del Miño se multiplicó por siete respecto a su caudal normal en diciembre, al llegar los 1.976 m3/s de agua transportada, cuando lo normal en esta época del año es de 273 m3/s.
#Vídeo El impresionante caudal del Miño asolaga las instalaciones termales de Outariz pic.twitter.com/nWBsDZ4ljY
— La Región (@LaRegion) December 17, 2019
Lejos de febrero de 2016
En una semana se ha multiplicado por siete el caudal, que era de 300 m3/s hace apena unos días, aunque no alcanzó los niveles del 14 de febrero de 2016, récord histórico según el Anuario de Aforos de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS), cuando el Miño llegó a circular con 3.143 m3/s. Sí se superó a 2018, cuando el récord de agua transportada había sido de 1.143 m3/s, y 2017, de 689 m3/s.
La jornada estuvo marcada por una crecida constante en todos los cauces, lo que activó el umbral de alerta por desbordamiento –nivel máximo que recoge la CHMS– en la desembocadura del Avia en el Miño (Ribadavia), que obligó a cortar varios caminos, y aguas abajo de la desembocadura del Sil en el Miño (A Peroxa), donde se marcaron récords con casi 8 metros de nivel, aunque sin consecuencias directas sobre la población y sin llegar a la N-120. También se activó el nivel de prealerta en el Sil a su paso por O Barco y en el Arnoia en Baños de Molgas, donde se cortó la carretera a Os Milagros.. A última hora, se cerraba al tráfico la OU-0511 (Pereiro de Aguiar), al desbordarse de un regato en el kilómetro 4.
Todo este desenfreno de las aguas llegadas a Ourense, que a media tarde de este lunes estaban a apenas 70 centímetros de alcanzar el nivel máximo de riesgo de desbordamiento, motivó que la Policía Local balizara diferentes zonas en las márgenes del Miño. Quedaron anegados el aparcamiento y la fuente termal del Tinteiro, las termas do Muíño, el paso del Miño desde el Parque Miño hasta el acceso centro... También se suspendió el servicio de tren de las termas, al no poder circular por su trazado habitual, cubierto por el agua. En el barrio de Reza, donde un desprendimiento de la carretera en la rúa do Portalón ha causado la regulación semafórica, el teniente alcalde y concejal de Perímetro Rural, Jorge Pumar, avanzó que la semana próxima se licitará la reparación.
En el sur de la provincia, la Confederación Hidrográfica del Duero pidió "especial atención" en el Támega, en Verín, que está "en alarma".
La jornada de este lunes también causó retrasos en hasta cuatro líneas de tren afectadas por un desprendimiento por culpa de las lluvias entre Ribadavia y Barbantes, que provocó que el Alvia a Barcelona se demorase tres horas en salir de Ourense y que el Alvia de las 10,27 horas a Madrid saliese con más de dos horas de retraso. Además, varias líneas tuvieron que continuar en autobús. Se produjeron dos accidentes de coche, con dos heridos.
Este martes, tregua
El tiempo dará este martes una tregua, debido a que la borrasca Daniel se aleja de la Península, según la Agencia Estatal de Meteorología. Sin embargo, a partir de mañana miércoles vuelven las lluvias, de carácter moderado en algunos puntos, y que continuarán hasta el fin de semana. Los desbordamientos se extiendes a toda Galicia, en los ríos Ouro, Landro, Labrada, Azúmara y Ladra (Lugo), Eume y Mandeo (A Coruña) y Umia, Lérez y Verdugo (Pontevedra).
Cortes en los paseos del Miño en la ciudad y en la zona termal
En la ciudad, las piscinas de Oira, los paseos del Miño en ambos márgenes y la zona termal tuvo que ser precintada por la Policía Local. Al pasar Os Peares, el río subió al nivel de máxima alerta, en el entorno de Gulfariz (A Peroxa), llegando a producir desbordamientos.
Carreteras y caminos cortados y previsión de ir a más
Hubo inundaciones en algunas carreteras, como la OU-1104 entre Trasmiras y Sarreaus; se cortó la carretera que une Baños de Molgas y Os Milagros y la OU-0511, carretera de Loñoá (Pereiro), anegada por un regato. También había previsión de cortar la OU-0305 en Arnoia.
