En 2015, 4.194 personas se mudaron a la capital, que registró un balance migratorio positivo por primera vez desde 2012
El Concello de Ourense tiene un balance migratorio positivo por primera vez desde 2012, cuando el saldo fue de 316 personas. Los datos de la Encuesta de Variaciones Residenciales, publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), constatan que, aunque el pasado año la capital no frenó su caída de población (esta estadística no incluye nacimientos y defunciones), sí fue capaz de poner freno a la fuga de personas. Así, se registraron 4.194 altas y 4.132 bajas en el padrón municipal, lo que refleja un balance positivo en 2015 de 62 personas. Tanto en 2014 como en 2013, el Concello perdió 220 y 105 residentes, respectivamente.
Los flujos de población señalan también que casi la mitad, un 48,3%, de los nuevos empadronados en la ciudad -2.029- llegan desde otros municipios de la provincia, mientras que 692 proceden del resto de Galicia, 603 de otras comunidades autónomas y 670 desde algún país extranjero.
Por su parte, de los 4.132 ourensanos que hicieron las maletas en 2015, 1.712 eligieron como lugar de residencia alguno de los 91 concellos de la provincia, 841 se fueron a otros puntos de Galicia, 944 a otra comunidad autónoma y 635 fuera de España.
Los datos divulgados por el INE señalan también que son más mujeres -2.264- que hombres -1.930- los que nutren la listas de habitantes en el Concello. Asimismo, por tramos de edad, el 70% de aquellos que llegaron a Ourense tienen menos de 45 años, siendo la franja entre 25 y 34 años -1.018- la que más personas aportó. Por su parte, fueron 589 los jubilados que eligieron el Concello para fijar su residencia en 2015.
La tendencia es similar en lo que respecta a las bajas residenciales, manteniéndose las cifras en los mismos porcentajes. Así, de los 4.132 movimientos para dejar la capital ourensana, 1.057 lo protagonizaron jóvenes de hasta 25 años de edad, 1.106 personas entre 25 y 34 años. Asimismo, se marcharon 470 personas de más de 65 años.
Inmigración
Dos de cada diez personas que se dieron de alta en el padrón del Concello de Ourense llegaron desde el extranjero, subiendo la cifra hasta las 899 personas. De estos, casi la mitad -441- llegaron desde América, 270 desde otros países de Europa, 135 del continente africano y 52 desde Asia. Las cifras de inmigración, sin embargo, están lejos de las alcanzadas hace cinco años, cuando llegaron a la ciudad 1.239 personas de otras nacionalidades.
Por contra, 800 personas extranjeras dejaron Ourense a lo largo de 2015, la mayoría -336- con billete de vuelta a otros países de la Unión Europea, mientras que 298 regresaron al continente americano, 97 a África y 57 a Asia.
