Nuevo tirón de orejas de los técnicos del Concello a la gestión económica del actual gobierno local. El Concello acaba de aprobar, por la vía de urgencia, una inyección de remanente de 50.000 euros para pagar a dos entidades sociales: Proxecto Home y Comité Cidadán Antisida. Con ambas entidades había firmado un convenio el año pasado, pero al no tener presupuestos, ya no hay partidas para poder abonar dichos compromisos. Esto ha generado que la concelleira de Asuntos Sociales pidiese de urgencia meter 50.000 euros del ahorro, pese a que el ejercicio presupuestario de 2023 no está liquidado -la fecha máxima era el 1 de marzo, por lo que se ha incumplido- y el dinero se inyectará más o menos “a ojo”, suponiendo, como se supone, que hay dinero en el banco.
Goteo
Esta nueva inyección de dinero del remanente por la vía de urgencia ha provocado que el jefe de Xestión Económica e Orzamentaria, Julio Fontaíña, haya advertido de que “deben adoptarse todas as medidas e dotarse de todos os medios humanos e técnicos necesarios para poder cumprir con estas datas de peche orzamentario, e non buscar suplir os atrasos que aquí se poidan arrastrar cun goteo continuo de solicitudes de incorporación de remanentes de crédito a tramitar por este Órgano de Xestión Económica e Orzamentaria Municipal”. Así se refiere a que “a previsión legal para a confección da liquidación do orzamento é o 1 de marzo do ano posterior o que esta se refire, data que a día de hoxe xa se ten superado”.
A día de hoy, y sin haberse liquidado todavía el ejercicio 2023, ya se han tramitado 11 expedientes de incorporación de remanentes de crédito, que superarían los 25 millones de euros. Muchos de estos expedientes con informes en contra, todos ellos devueltos por parte del interventor, el máximo órgano fiscalizador, pero sacados adelante vía decreto del alcalde.
Deudas
A día de hoy, el remanente de tesorería disponible ascendería a 84 millones de euros, si bien hay más de 50 millones de euros pendientes de pago entre deudas a concesionarias sin cuantificar, facturas sin tramitar por falta de asignación presupuestaria acumuladas en la cuenta 413 y retrasos en los pagos a proveedores. De hecho, el Concello cerró el pasado mes de febrero triplicando la cifra máxima del periodo legal permitido para pagar facturas. Ya hay una demora de casi tres meses.
Sin presupuestos
Mientras tanto, el gobierno local sigue siendo incapaz de presentar un borrador de presupuestos, y también de liquidar el ejercicio anterior, lo cual obliga a inyectar remanentes por la vía de urgencia con la oposición de la mayoría de los técnicos, que ven muchas lagunas en este proceder instalado en la era Jácome.
