A mediados de febrero, el comité clínico acordó crear unas unidades poscovid para ayudar a las personas que se contagiaron a alcanzar una recuperación completa. Esta medida está a punto de ser una realidad e integrará a profesionales de Atención Primaria, Neumología y Medicina Interna para que luchen contra las secuelas o síntomas que aún persisten a causa del virus. “Queremos acompañar ao enfermo ata a súa plena recuperación e para iso contaremos cun equipo multidisciplinar”, aseguró ayer Julio García Comesaña, conselleiro de Sanidade.
María Dolores Díaz, médica de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del CHUO, será la encargada de coordinar estas unidades en la provincia, donde ya hay más de 14.400 personas que superaron el virus. “Buscamos estudar a evolución das posibles consecuencias noutros campos, para ir un paso por diante”, destacó Comesaña. La plataforma de Telea y las interconsultas serán fundamentales a la hora de tratar a los pacientes recuperados de la infección, pero que todavía se enfrentan a sus consecuencias. “Curaremos, coidaremos e acompañaremos na recuperación
La Axencia de Coñecemento en Saúde ofreció ayer un webinar en el que se explicó en qué consistirán estas unidades que estarán operativas próximamente. El germen comenzó en mayo del año pasado, cuando algunas áreas sanitarias organizaron grupos de trabajo para estudiar los casos más graves. Una parte de los que no sufrieron a este nivel la infección, a las pocas semanas desarrolla alteraciones que “van ligadas a la gravedad”, apuntó José Alberto Fernández, neumólogo del Álvaro Cunqueiro que participó en esta sesión. Las secuelas que se han detectado hasta ahora van desde la fatiga a las cefaleas, pasando por otras cuestiones como la pérdida de pelo o concentración. Esto serían secuelas más leves, otras se pueden presentar con dificultad respiratoria, palpitaciones o un síndrome de fatiga más agudo.
Los casos más graves serán derivados de Atención Primaria -quien asume de entrada a estos pacientes- a los hospitales y en el plazo de tres meses, se evaluará su progresión para determinar el siguiente paso, hasta llegar a la recuperación completa. Pilar Rodríguez, médica de Familia en Lugo, detalló el perfil de los pacientes: “Los que presentan secuelas suelen ser hombres de avanzada edad con comorbilidad, mientras que aquellos con un covid persistente son, en su mayoría, mujeres de entre 35 y 50 años sin otras patologías, puede que una leve asma”. Estos últimos, conocidos como “long-covid” suelen manifestar una sintomatología que se presenta con la infección activa que puede ir de dificultad respiratoria a la falta de olfato o gusto.
