Durante la madrugada de este domingo, España cambiará de hora, dejando atrás el horario de verano y adentrándose en el horario de verano. Este cambio se producirá exactamente a las 2:00 horas de la mañana, que pasarán a ser las 3:00, quitándonos una hora de sueño.
A este cambio no le queda mucho, pues según afirma el Real Decreto 236/2002, del 1 de marzo, el 25 de octubre de 2026 se producirá el último cambio de hora, dejando así a España en el horario de invierno.
¿Cómo afecta el cambio de hora a nuestro cuerpo y salud?
Está demostrado que el cambio de hora afecta al cuerpo humano en gran medida, afectando a como percibimos el concepto del tiempo debido al cambio de las horas de luz, lo que afecta a la luz que hay durante las diferentes actividades que llevamos a cabo a lo largo del día. El efecto que produce este cambio de hora ha sido comparado en más de una ocasión al producido por el conocido jet-lag, pero con una menor intensidad.
Los síntomas más comunes de este proceso son: sensación de cansancio, dificultad para concentrarse, somnolencia e irritabilidad. En muchas ocasiones se suma también la dificultad para conciliar el sueño y posibles desajustes alimentarios.
Consejos para adaptarse al cambio de hora
Para adaptarse al cambio de hora de una manera rápida para evitar padecer los síntomas previamente mencionados más del mínimo tiempo necesario, es una buena opción adelantarse al cambio. Si acostumbramos a nuestro cuerpo unos días antes a dormir antes y levantarnos antes, no afectará tanto el cambio, pues parte de las rutinas ya han sido adaptadas a este nuevo horario.
Es importante evitar consumir bebidas estimulantes, como bebidas energéticas, café o bebidas alcohólicas. Si durante los primeros tres días, que es el período que el cuerpo tarda en adaptarse al cambio, no logramos conciliar el sueño, es necesario tratar de evitar el consumo de medicamentos para dormir, pues luego nuestro organismo dependerá de ellos para esto.
