El Día del Trabajador representa la lucha que toda la sociedad ha llevado a cabo por mejorar sus condiciones de vida. En un momento en el que la economía no deja de transformarse, es necesario repasar las raíces de la lucha obrera por un empleo digno y seguro.
Esta es una jornada por un lado festiva, porque sirve para celebrar lo que la sociedad ha logrado en materia de derechos laborales. Pero, por otro lado, sirve para reivindicar más exigencias y mejores condiciones. Además, el 1 de mayo, o Primero de Mayo, es común en muchos países.
Origen
Para conocer el motivo es necesario remontarse al siglo XIX, cuando en el año 1889 el Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional lo adoptó en París para homenajear a los Mártires de Chicago. Previamente, se había extendido una serie de movimientos obreros por todo el mundo, también en Estados Unidos. Los trabajadores sufrían cada día jornadas de 16 horas, en el mejor de los casos. Algunos estados americanos ponían el límite en 18 horas.
Ante esta situación, los sindicatos decidieron plantarse por una jornada máxima de ocho horas. La idea es que el día pudiera dividirse en ocho horas de trabajo, ocho horas de ocio y ocho horas de descanso. Se organizaron numerosos paros y huelgas, a pesar de que muchas empresas hacían caso omiso a sus exigencias.
Estas protestas resultaron especialmente firmes en la ciudad de Chicago, donde durante cuatro días los protestantes se manifestaron contra la policía por su actitud violenta. En el cuarto día de estas protestas, el 4 de mayo, estalló un artefacto en Haymarket que acabó con la vida de un agente. Esto provocó una treintena de personas fueran detenidas acusadas de "ideas radicales". De ellas, tres fueron condenadas a prisión y cinco a la horca. Por lo que reciben el famoso nombre de los "Mártires de Chicago".
Curiosamente, en Estados Unidos no se celebra la fecha el Primero de Mayo. Precisamente se tomó esta decisión para desvincular la celebración de la causa obrera por miedo a que triunfaran los postulados socialistas que se extendían en Europa.
