VALDEORRAS

La empresa de la ORA de 
O Barco renueva sus medios

photo_camera Un equipo de trabajadores pinta las líneas de la zona azul en la Avenida da Estación (Foto: J.C.)

Comenzó el pintado de la zona azul y la renovación de las máquinas expendedoras de tiques 

La concesionaria de la ORA en O Barco, Dornier SA, comenzó la renovación del servicio en la villa. Un equipo de trabajadores comenzaron la colocación de las bases de las nuevas máquinas expendedoras de tiques, las más modernas del mercado, según fuentes próximas a la empresa. Estarán alimentadas mediante placas solares y permitirán el uso de tarjetas de crédito de todos los bancos.

A su vez, los usuarios deberán introducir la matrícula del vehículo. Esta medida permitirá que, en caso de denuncia, su cuantía solo la podrá comprobar el conductor en la máquina de tiques. Los trabajadores -su plantilla está formada por tres- dejarán un aviso y no el recibo de la multa.

Las nuevas máquinas serán colocadas al lado de las actuales, que solo se retirarán cuando el nuevo sistema funcione en su totalidad. Serán 22, una más que las 21 actuales, por razones de facilitar el acceso a los usuarios. "El nuevo sistema es más eficiente y prestará un mejor servicio", comentaron las fuentes consultadas.

La instalación de nuevos equipos será acompañada con la renovación de la pintura que delimita las plazas de estacionamiento de la ORA. Los trabajos comenzaron en las últimas horas y ya recibieron alguna crítica de la oposición popular. Su portavoz, Moisés Blanco Paradelo, criticó que las labores se prolongasen en la madrugada del martes al miércoles. "La empresa de la ORA pintó la zona azul con nocturnidad, a la una de la madrugada, con las molestias que generó entre los vecinos", protestó el edil. Durante la mañana de ayer, los trabajos continuaron en las calles del centro de la villa, cortando temporalmente alguna calle y causando alguna que otra molestia a los conductores.

Un concurso rodeado de polémica

La adjudicación del servicio de la ORA a Dornier SA salió adelante con los votos del equipo de gobierno socialista. El concejal del BNG votó en contra y los ediles populares abandonaron el salón de plenos al llegar la votación, la misma actitud que mostraron en la mesa de contratación. Su postura no extrañó a nadie ya que en abril denunciaron al alcalde, Alfredo García Rodríguez, por un posible delito de malversación. Argumentaron que la concesionaria, la misma que se hizo con el nuevo concurso, estuvo trabajando sin contrato durante cinco años. El regidor se defendió aludiendo a la falta del personal necesario para sacar a concurso el servicio. El expediente se encuentra en la fase de diligencias previas.


El nuevo contrato incluye la contratación de un nuevo coche grúa, que se ocupará de retirar los vehículos que sea necesario de las 581 plazas de la ORA de O Barco.

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