La Audiencia de Ourense juzgó ayer a puerta cerrada a Saturnino Torres Soto, un vecino de O Barco, de 53 años, que se sentó en el banquillo de los acusados por abusar sexualmente de tres niñas menores de edad a las que engañó con revistas, muñecas y pulseras.
Los graves hechos que llegaron a juicio, reconocidos por el propio encausado, ocurrieron, según mantuvo la acusación -tanto pública como particular- antes de 2009, después de que Saturnino Torres lograse ganarse la confianza de las víctimas -apenas llegaban a los 10 años en el momento de los hechos- para que acudiesen a su casa, tras engatusarlas con los citados regalos.
El ministerio público atribuyó al procesado haber consumado el acto sexual con dos de las menores, mientras que, en el caso de la tercera, lo acusó por realizarle distintos tocamientos en la zona púbica.
Torres Soto, que lleva en prisión desde marzo de 2011 por esta causa, se personó ayer en la Audiencia de Ourense cabizbajo y, tras acceder a su sala de vistas custodiado por dos agentes de la Policía Nacional, confesó ante el tribunal que lo enjuició ser autor de los abusos, al igual que cuando fue interrogado en la fase de instrucción judicial.
Durante la vista oral, que no tuvo el carácter de pública para preservar la intimidad de las menores, se proyectó un vídeo grabado con la declaración de las tres menores, y se tomó declaración a dos médicos foreses, así como a dos psicólogos.
Mientras que los primeros indicaron que las muestras tomadas en los exámenes físicos a las menores son 'compatibles' son las violaciones; los segundos, dieron credibilidad a la declaración de las víctimas del caso.
la petición de condenas
Dada la confesión del encausado, el fiscal solicitó para él, al igual que la acusación particular, una pena de siete años y medio de cárcel por cada uno de los dos delitos continuados de abusos que le atribuye -15 en total, aunque pedía 23 en un principio-, por las relaciones que mantuvo con las dos menores. Asimismo, el ministerio público pidió para él una multa de 20 meses a razón de seis euros diarios por un delito de agresión sexual (por los tocamientos). La defensa, en todo caso, solicita que se le apliquen la penas mínimas.
50.000 euros
Es la cantidad económica solicitada por el ministerio público en el juicio, así como por la acusación particular, para indemnizar a las dos víctimas menores con las que el acusado llegó a consumar el acto sexual.
25 años
Las acusaciones -pública y particular- interesaron que el acusado no pueda acercarse a las víctimas o sus familiares, ni residir en el municipio de O Barco durante 25 años.
El ministerio público atribuyó al procesado haber consumado el acto sexual con dos de las menores, mientras que, en el caso de la tercera, lo acusó por realizarle distintos tocamientos en la zona púbica.
Torres Soto, que lleva en prisión desde marzo de 2011 por esta causa, se personó ayer en la Audiencia de Ourense cabizbajo y, tras acceder a su sala de vistas custodiado por dos agentes de la Policía Nacional, confesó ante el tribunal que lo enjuició ser autor de los abusos, al igual que cuando fue interrogado en la fase de instrucción judicial.
Durante la vista oral, que no tuvo el carácter de pública para preservar la intimidad de las menores, se proyectó un vídeo grabado con la declaración de las tres menores, y se tomó declaración a dos médicos foreses, así como a dos psicólogos.
Mientras que los primeros indicaron que las muestras tomadas en los exámenes físicos a las menores son 'compatibles' son las violaciones; los segundos, dieron credibilidad a la declaración de las víctimas del caso.
la petición de condenas
Dada la confesión del encausado, el fiscal solicitó para él, al igual que la acusación particular, una pena de siete años y medio de cárcel por cada uno de los dos delitos continuados de abusos que le atribuye -15 en total, aunque pedía 23 en un principio-, por las relaciones que mantuvo con las dos menores. Asimismo, el ministerio público pidió para él una multa de 20 meses a razón de seis euros diarios por un delito de agresión sexual (por los tocamientos). La defensa, en todo caso, solicita que se le apliquen la penas mínimas.
50.000 euros
Es la cantidad económica solicitada por el ministerio público en el juicio, así como por la acusación particular, para indemnizar a las dos víctimas menores con las que el acusado llegó a consumar el acto sexual.
25 años
Las acusaciones -pública y particular- interesaron que el acusado no pueda acercarse a las víctimas o sus familiares, ni residir en el municipio de O Barco durante 25 años.
