La falta de personal obligó al Concello de O Barco a retrasar dos semanas la apertura de la guardería municipal, obligando a las familias trabajadoras a buscar canguros improvisados para sus hijos. El cambio de la fecha de inicio del curso causó un fuerte malestar entre algunos padres que también están molestos por haber recibido el aviso del aplazamiento el lunes, apenas dos días antes de la fecha prevista para la apertura.
'Durante esta semana voy a estar de viaje y mi hija iba a estar en la guardería. Ahora, tendré que buscar con quién dejarla', dijo Vanessa Rodríguez, madre de una de las alumnas.
No es la única afectada por un problema que obligó a los padres trabajadores que ya habían adaptado sus jornadas al horario de la guardería. El retraso en la apertura les obligó a buscar unas alternativas que pasan por pedir días libres en sus trabajos para poder atender a sus hijos, a recurrir a la familia o bien a contratar una persona para que se ocupe de ellos durante varias semanas.
AVISO
Los padres fueron avisados por teléfono de que la guardería retrasaba, posiblemente hasta el próximo 17 de septiembre, su apertura. 'Nos dijeron que había problemas en la contratación del personal', explicó Vanessa Rodríguez.
La concejala de Servizos Sociais, Igualdade e Xuventude, Natalia Álvarez Diéguez, resumió los citados problemas de contratación en los recortes del Plan de Cooperación de la Xunta. Este programa aportaba dos de los cinco trabajadores de la guardería municipal y su supresión puso al Concello ante la disyuntiva de 'retrasar el inicio o no admitir a todos los niños', según explicó la concejala. Al final, prevaleció la primera opción.
'La decisión fue tomada para no perjudicar a ninguna familia', apuntó Natalia Álvarez, quien criticó los recortes de la Xunta en el Plan Concertado. 'Los servicios básicos, como los de la infancia, no se deberían tocar', apuntó.
La guardería municipal de O Barco no pertenece a la red Galiña Azul, a pesar de los letreros que exhibe en su fachada. Pese a ello, la apertura del curso coincide con la de sus centros. Consta de cuatro aulas y tiene aproximadamente a 40 niños inscritos, aunque, como dijo Natalia Álvarez, el cupo aún no está completo. Abre antes de las 8,00 horas para finalizar a las 17,00, según la concejala.
El portavoz municipal del PP, Moisés Blanco Paradelo, culpó a la 'falta de planificación' del Concello del retraso en la apertura del servicio y, si éste fue inevitable, de no haber avisado antes a los padres. 'Tenía que saber que el curso iba a empezar y pudo haber avisado a los padres antes', dijo el concejal. Lamentó los problemas que el retraso de dos semanas en el inicio del curso causará a los padres trabajadores, en detrimento de la política de 'conciliación de la vida laboral y familiar'.
No es la única afectada por un problema que obligó a los padres trabajadores que ya habían adaptado sus jornadas al horario de la guardería. El retraso en la apertura les obligó a buscar unas alternativas que pasan por pedir días libres en sus trabajos para poder atender a sus hijos, a recurrir a la familia o bien a contratar una persona para que se ocupe de ellos durante varias semanas.
AVISO
Los padres fueron avisados por teléfono de que la guardería retrasaba, posiblemente hasta el próximo 17 de septiembre, su apertura. 'Nos dijeron que había problemas en la contratación del personal', explicó Vanessa Rodríguez.
La concejala de Servizos Sociais, Igualdade e Xuventude, Natalia Álvarez Diéguez, resumió los citados problemas de contratación en los recortes del Plan de Cooperación de la Xunta. Este programa aportaba dos de los cinco trabajadores de la guardería municipal y su supresión puso al Concello ante la disyuntiva de 'retrasar el inicio o no admitir a todos los niños', según explicó la concejala. Al final, prevaleció la primera opción.
'La decisión fue tomada para no perjudicar a ninguna familia', apuntó Natalia Álvarez, quien criticó los recortes de la Xunta en el Plan Concertado. 'Los servicios básicos, como los de la infancia, no se deberían tocar', apuntó.
La guardería municipal de O Barco no pertenece a la red Galiña Azul, a pesar de los letreros que exhibe en su fachada. Pese a ello, la apertura del curso coincide con la de sus centros. Consta de cuatro aulas y tiene aproximadamente a 40 niños inscritos, aunque, como dijo Natalia Álvarez, el cupo aún no está completo. Abre antes de las 8,00 horas para finalizar a las 17,00, según la concejala.
El portavoz municipal del PP, Moisés Blanco Paradelo, culpó a la 'falta de planificación' del Concello del retraso en la apertura del servicio y, si éste fue inevitable, de no haber avisado antes a los padres. 'Tenía que saber que el curso iba a empezar y pudo haber avisado a los padres antes', dijo el concejal. Lamentó los problemas que el retraso de dos semanas en el inicio del curso causará a los padres trabajadores, en detrimento de la política de 'conciliación de la vida laboral y familiar'.
