La apuesta del Concello de A Veiga por la judía autóctona, la "Faba Loba das Montañas de Trevinca", comenzó a dar fruto. El proyecto que impulsó hace un año posibilitó que se agotase la primera tonelada de esta legumbre, a pesar de la interrupción obligada por la crisis sanitaria del virus covid-19. Este resultado llevó al Concello a anunciar la convocatoria de nuevas ayudas para los posibles interesados.
"Queremos seguir co proxecto. Xa aumentou a superficie de plantación este ano", comentó el alcalde, Juan Anta Rodríguez. El Boletín Oficial de la Provincia publicaba ayer el anuncio informando de las ayudas que convocó el concello para la adquisición de estacas metálicas, mallas y la propia faba loba (Phasseolus coccineus), asumiendo la totalidad del coste las arcas municipales. El texto indicó que las subvenciones pretenden "fomentar a actividade económica continuada e diversificada no medio rural e poñer en marcha políticas e estratexias de desenvolvemento económico sostible, que reforcen os papeis dos emprendedores e dinamicen a economía local".
Una treintena de personas se dedica a la producción de la legumbre, sumando una docena de nuevas incorporaciones a las que apostaron por el proyecto desde el principio. La superficie plantada con la legumbre se aproxima a las dos hectáreas, según los cálculos municipales, a la espera de la revisión de las fincas.
