Tras una semana cerrado debido a los efectos del incendio que se produjo en los alrededores de O Barco y Rubiá los pasados 9, 10 y 11 de agosto, el punto limpio de la capital comarcal abría ayer de nuevo sus puertas 'con cierta normalidad', según señalaba el alcalde barquense, el socialista Alfredo García. Todavía en la jornada de ayer se estaba echando cemento en algunas zonas 'y estamos retirando los árboles quemados de la zona del cierre, pero las personas que quieran acercarse a dejar aquí sus artículos desechados pueden hacerlo', aseguraba García.
El regidor explicó que, aunque el recinto se vio afectado por las llamas, 'no hubo grandes pérdidas' y los colectores 'valen'.
En el caso de la planta de compostaje, que también se vio afectada por el fuego, los operarios se encuentran 'limpiando' los restos quemados y el regidor espera que 'nos manden algún técnico de la casa fabricante' para evaluar si las dos máquinas 'tienen arreglo o hay que comprar unas nuevas'. La solicitud ya está cursada por parte del Concello, que todavía no ha obtenido respuesta de la empresa.
OTROS DAÑOS
En cuanto al resto de los daños causados por las llamas en el mayor incendio producido en la provincia durante este mes de agosto, 'todavía se están evaluando y no nos marcamos fecha para cuantificar los daños', explicó el alcalde de O Barco.
En el caso de la planta de compostaje, que también se vio afectada por el fuego, los operarios se encuentran 'limpiando' los restos quemados y el regidor espera que 'nos manden algún técnico de la casa fabricante' para evaluar si las dos máquinas 'tienen arreglo o hay que comprar unas nuevas'. La solicitud ya está cursada por parte del Concello, que todavía no ha obtenido respuesta de la empresa.
OTROS DAÑOS
En cuanto al resto de los daños causados por las llamas en el mayor incendio producido en la provincia durante este mes de agosto, 'todavía se están evaluando y no nos marcamos fecha para cuantificar los daños', explicó el alcalde de O Barco.
