Repsol empezará a construir la red de gas propano en A Rúa y amplía la de O Barco

Las obras obligaron a cerrar una acera.
Con un año de retraso sobre los plazos iniciales, Repsol Butano comenzará la obra de construcción de la red de gas propano domiciliario en A Rúa dentro de 15 días. El anuncio fue realizado ayer por el alcalde, Avelino García Ferradal, después de entrevistarse con los responsables de la empresa.
La cita permitió la firma del acta de replanteo de los terrenos de A Graveira, donde el proyecto de gasificación de la villa prevé construir los depósitos de almacenamiento, y de las obras que realizará en el casco urbano. Inicialmente, los planos contemplan la colocación de conducciones a lo largo de 6.647 metros. Pese a ello, la empresa prefiere hablar de un 'proyecto vivo', que se irá desarrollando en función de la demanda.

El alcalde valoró favorablemente que el asfalto de dos céntricos parajes de la villa, la nueva rotonda y la calle Circunvalación, queden excluidos de las obras, al menos en un principio. Esta decisión obligará a trabajar en las aceras de la citada rotonda.

Repsol Butano agiliza los contactos para abrir la oficina comercializadora en el centro del pueblo, en un local muy próximo al Consistorio. Los técnicos confían en que el estudio de mercado realizado hace un par de años, que dio luz verde a la ejecución del proyecto, sea superado por la demanda de los vecinos, una vez que el servicio comience a funcionar.

Antes, tendrán que estar finalizadas unas obras que comenzarán en el paraje de A Graveira con la construcción e instalación de los sistemas de almacenamiento. Posteriormente, las conducciones serán llevadas hasta el casco urbano, a la altura de la calle Campo Grande, desde donde se llevarán por buena parte de la villa.


O BARCO

Los últimos detalles previos al inicio de la red de gas propano domiciliario de A Rúa coinciden con las obras que Repsol Butano inició hace días para ampliar la red de O Barco. Los trabajos se están desarrollando en el núcleo de Viloira, al que accedieron por el puente que cruza el río Sil, una de cuyas aceras fue cerrada al paso de peatones para permitir la ejecución de la obra.

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