En dos meses, la carretera de Éntoma (O Barco) fue escenario de tres accidentes de circulación, que se saldaron con cinco heridos. El último sucedió ayer, al volcar un coche, provocando un herido grave. El paso por la N-536 de los camiones que trabajan en la eliminación de escombreras de pizarras genera una capa de barro muy deslizante que, además de provocar quejas vecinales, desvió parte del tráfico hacia el vial alternativo de Éntoma, que muchos usan para poner a prueba la velocidad de sus coches.
La carretera OU-801, que comunica O Barco y Sobradelo (Carballeda de Valdeorras) a través de Éntoma, registró ayer su tercer accidente de circulación en un plazo inferior a dos meses. El balance es de cinco heridos, dos turismos y una moto destrozados y dos Land Rover dañados. Las estadísticas preocupan y en Tráfico comienzan a buscar las posibles causas.
Muchos usuarios del vial no ponen reparos a circular con una velocidad excesiva. Os rapaces se citan nesta estrada para poñer a proba os seus coches, dijo un vecino de Éntoma. En este pueblo, el radar que Tráfico es bien recibido.
Otro factor que elevó el peligro de la carretera de Éntoma es el aumento de tráfico de los últimos meses. La causa hay que buscarla en las obras de restauración de las escombreras de pizarra próximas a la N-536.
Los camiones usados en estos trabajos dejan una capa de barro sobre la calzada, que aumenta el peligro de la estrecha e intrincada carretera por la que discurre el tráfico de la cuenca pizarrera de Casaio. El lavado de la calzada que periódicamente realizan las empresas no alcanza a resolver todo el problema.
Un barquense reconocía que un pariente suyo dio un trompo en el deslizante piso de la N-536, un firme que consideró moi perigoso un vecino de Millarouso. Ante esta situación, muchos eligen el vial de Éntoma.
Un herido grave al volcar su coche
El joven de Éntoma (O Barco) Rubén Silva López, de 18 años, resultó herido grave al volcar el turismo Citroën Xsara en el que viajaba. Con él iba Iván Martínez Vázquez, también de 18 años y vecino de O Barco, que resultó ileso. Ambos fueron trasladados al Hospital Comarcal Valdeorras en dos ambulancias del 061 barquense.
El accidente se produjo a las 8,30 horas del viernes uno de febrero, en el kilómetro uno de la OU-801, que comunica O Barco y Sobradelo (Carballeda), más conocida como la carretera de Éntoma.
Cuando los dos jóvenes se dirigían a la villa barquense para ir a clase, el conductor perdió el control del turismo, que se salió de la calzada. El Citroën se subió al talud de la vía del ferrocarril de la línea Palencia-A Coruña, recorriendo unos 50 metros por él y rompiendo un pequeño árbol antes de regresar a la carretera. El coche cayó atravesado sobre la calzada, quedando con las ruedas para arriba, totalmente destrozado. Los agentes de la Guardia Civil de Tráfico de O Barco tuvieron que moverlo para liberar un carril y dar salida a la cola de coches formada.
Muchos usuarios del vial no ponen reparos a circular con una velocidad excesiva. Os rapaces se citan nesta estrada para poñer a proba os seus coches, dijo un vecino de Éntoma. En este pueblo, el radar que Tráfico es bien recibido.
Otro factor que elevó el peligro de la carretera de Éntoma es el aumento de tráfico de los últimos meses. La causa hay que buscarla en las obras de restauración de las escombreras de pizarra próximas a la N-536.
Los camiones usados en estos trabajos dejan una capa de barro sobre la calzada, que aumenta el peligro de la estrecha e intrincada carretera por la que discurre el tráfico de la cuenca pizarrera de Casaio. El lavado de la calzada que periódicamente realizan las empresas no alcanza a resolver todo el problema.
Un barquense reconocía que un pariente suyo dio un trompo en el deslizante piso de la N-536, un firme que consideró moi perigoso un vecino de Millarouso. Ante esta situación, muchos eligen el vial de Éntoma.
Un herido grave al volcar su coche
El joven de Éntoma (O Barco) Rubén Silva López, de 18 años, resultó herido grave al volcar el turismo Citroën Xsara en el que viajaba. Con él iba Iván Martínez Vázquez, también de 18 años y vecino de O Barco, que resultó ileso. Ambos fueron trasladados al Hospital Comarcal Valdeorras en dos ambulancias del 061 barquense.
El accidente se produjo a las 8,30 horas del viernes uno de febrero, en el kilómetro uno de la OU-801, que comunica O Barco y Sobradelo (Carballeda), más conocida como la carretera de Éntoma.
Cuando los dos jóvenes se dirigían a la villa barquense para ir a clase, el conductor perdió el control del turismo, que se salió de la calzada. El Citroën se subió al talud de la vía del ferrocarril de la línea Palencia-A Coruña, recorriendo unos 50 metros por él y rompiendo un pequeño árbol antes de regresar a la carretera. El coche cayó atravesado sobre la calzada, quedando con las ruedas para arriba, totalmente destrozado. Los agentes de la Guardia Civil de Tráfico de O Barco tuvieron que moverlo para liberar un carril y dar salida a la cola de coches formada.
