Cerrar Penouta supone la pérdida de 1,5 millones de euros mensuales

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Alcaldes, asociaciones sectoriales, sindicatos o trabajadores exigen la continuidad de la mina

Los alcaldes de Viana do Bolo, Vilariño de Conso y A Veiga, la Cámara Minera, asociaciones sectoriales, sindicatos y trabajadores se reunieron en el salón de plenos del Concello de Viana do Bolo para exigir la continuidad del proyecto de la Mina de Penouta.

Lo hicieron en rueda de prensa para manifestar su apoyo unánime a este proyecto como motor económico y social de Viana y su comarca, y como proyecto estratégico a nivel europeo que permite garantizar el suministro de los minerales clave para las nuevas economías verdes y digitales.

“Discrepamos más que absolutamente con la resolución del TSXG”, manifiesta Miguel de la Campa, presidente de Strategic Minerals. La resolución del TSXG decretó la paralización cautelar de la explotación tras la denuncia del grupo Ecoloxistas en Acción que alegaba graves impactos sobre el espacio protegido de Pena Trevinca, enmarcado dentro de la Red Natura 2000.

“Desde la compañía hemos llevado a cabo todas las medidas legales para revertir esta situación. Presentamos recursos de apelación y hacemos un llamamiento a la sociedad gallega para que se una a los actos de concentración de los próximos días”. “Las referencias a las que se apela en la sentencia del Tribunal Supremo perteneciente a otra mina- concretamente a la de de Feldespato situada en Lugo-, no a la explotación de Penouta. No entendemos como es posible que se tome una medida teniendo en cuenta otro proyecto de exploración e investigación que ni siquiera tiene explotación”, declaró.  

Esta decisión supone, según explican desde la empresa, la pérdida de 1,5 millones de euros mensuales, aparte de los 50 millones de euros invertidos en este proyecto. “Es insólito y el impacto es brutal para la comarca. Esperamos que entiendan que se ha cometido un error”, señaló De la Campa. “Las repercusiones del cierre cautelar en términos de imagen y seguridad jurídica para Galicia y España son muy relevantes, ante la paralización de inversiones, incluso extranjeras, que puede generar esta decisión”, sentencia la empresa. 

La compañía canadiense incide en que la decisión se basa en un riesgo de daño que no existe y que ni siquiera se menciona en el auto, y que por otro lado no se ha probado en una demanda en la que no se ha valorado el daño efectivo que provoca el cierre.

Los regidores manifestaron su unión al solicitar que la decisión del TSXG sea revocada evitando el cierre cautelar, ya que este no tiene “razón de ser”. En este sentido los alcaldes recordaron  que la medida cautelar se solicita inexplicablemente un año después de haberse concedido la resolución de la concesión. Juan Anta, alcalde de A Veiga, señaló además que “esta decisión ten un impacto letal sobre a comarca no emprego e na actividade económica”. “A escena é o suficientemente significativa para darse conta de que estamos absolutamente unidos e teñen o respaldo de todos nós”, añadió. Por su parte, Melisa Macía, alcaldesa de Vilariño añadió que “a inseguridade xurídica que se está a crear e sumamente grave”. 

Unión

Tanto los socialistas vianeses como los nacionalistas se posicionaron en contra de este cierre cautelar. Así, Germán García-Ávila, representante del PSdeG-PSOE, afirma que es necesario “facer unha piña para que esta situación se reverta xa que sería un dano altísimo para a poboación. A xente éncheselle a boca dicindo que hai que apoiar o rural e vemos que cada vez se poñen máis paos nas rodas”. 

Representantes de CCOO y CIG manifestaron las graves consecuencias que esto acarrea para la comarca, donde la explotación minera de Penouta se ha convertido en el sustento de muchas familias que están actualmente en una situación complicada. “Perderon este sustento da noite para a mañá”, señalaba Óscar Núñez, portavoz de la CIG. “Unha vez máis a burocracia tira en contra dos dereitos dos traballadores. Vivir no rural é un sacrificio que están facendo toda esta xente e cada vez nos poñen máis pedras no camiño. Unha vez que temos unha saída laboral ó lado da casa aparecen as problemáticas para afastarnos do rural. Cremos no rural e maiores ecoloxistas que estes traballadores non os vamos a atopar. Penouta non se pecha”, añadió.

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