Agentes ven "excesivo" el despliegue policial por la llamada del alcalde

Controversia en el seno de la Policía Local a raíz de la intervención de hasta tres patrullas en el conflicto en el negocio que ostenta el alcalde de Ourense, Gonzalo Pérez Jácome, en las Galerías Centrales de la rúa Concordia, un operativo que agentes consultados consideran "excesivo" al compararlo con otras situaciones similares que se producen habitualmente en la ciudad.

"Estas cosas nunca requieren la presencia de tres patrullas, no es algo normal", confirman fuentes del cuerpo consultadas, que hacen hincapié también en que la presencia de tantos agentes en la zona pudo dejar desprotegido el resto del municipio, al quedar para otros menesteres apenas una patrulla, dada la precaria situación en la que se encuentra la Policía Local, que apenas rebasa los 80 agentes.

El portavoz oficial del cuerpo se negó, por su parte, a informar sobre el suceso acontecido en la rúa Concordia, así como a explicar si Jácome llamó directamente a la jefatura o solicitó la presencial policial a través de los cauces habituales para cualquier ciudadano en su actividad privada.

Polémica

La discusión se originó después de que unos clientes mostrasen su malestar por los continuos retrasos en la entrega de un instrumento musical, exigiendo su devolución, a lo que al final accedió Jácome.

El alcalde ourensano, sin embargo, habla en sus redes sociales de que "los clientes se pusieron violentos", un extremo que niegan testigos presenciales de lo sucedido. "Lo que ocurrió es que unos clientes querían que les abonásemos un piano electrónico y cambiarlo por otro de otra marca. En Jolper accedimos a hacerles el favor pero los clientes trajeron el piano sin todos los accesorios, diciendo que ya los traerían, cosa que no se aceptó hasta que trajesen todos los originales. Se pusieron violentos y se negaron a salir del local, se llamó a la policía y al final se llevaron de vuelta su propio teclado", expone Jácome, que amenaza con una denuncia judical contra La Región.

El alcalde ourensano sigue atendiendo su negocio pese a contar con una dedicación exclusiva en el Concello. Aunque al principio llegó a plantear la compatibilidad, nunca más la ha pedido.