El Campus de Ourense creará un detector que guíe a refugios climáticos

La Universidad de Vigo y la Consellería de Medio Ambiente y Cambio Climático de la Xunta de Galicia firmaron ayer un convenio de colaboración para el desarrollo de un proyecto de acción contra el cambio climático. La institución académica diseñará una metodología para la elaboración de mapas de calor y localización de refugios climáticos en municipios gallegos, atendiendo a las necesidades de la biodiversidad.

El acuerdo fue firmado en el Campus de Ourense por Manuel Reigosa, rector de la Universidad de Vigo, y Ánxeles Vázquez, conselleira de Medio Ambiente y Cambio Climático, con la presencia también de Francisco Javier Rodríguez Rajo, vicerrector del Campus de Ourense; Paula Uría, directora xeral de Enerxías Renovables y Cambio Climático; Manuel Pardo, delegado de la Xunta en Ourense, y Pedro Orgeira, investigador de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Aeronáutica y del Espacio y del Grupo de Investigación en Tecnología Aeroespacial (ATRG)-atlanTTic de la UVigo, que es el responsable del proyecto.

La conselleira señaló que“é un convenio trascendental, temos que pensar na climatoloxía e cómo amortiguar ese picos de calor. Galicia quere ser un refuxio climático e aquí, neste Campus, temos grandes expertos que podrán implementar eses mapas de illas de calor e refuxios climáticos”. En cuanto al hecho de hacer la presentación del proyecto en Ourense, Ánxeles Vázquez recordó que “na última década o incremento das temperaturas foi de 0,2 grados, e se analizamos a media anual, en Ourense é un grado superior que a de Galicia, 14,7 graos frente aos 13,6 graos de media do resto de Galicia”.

Papel relevante

Reigosa, por su parte, quiso “agradecer que se esté programando ese futuro -ante el cambio climático en galicia- contando coa nosa Universidade”, añadiendo que “estou seguro que estaremos á altura”, y destacando “o traballo magnífico por parte do profesorado do Campus de Ourense, neste caso en concreto no eido tecnolóxico”.

Este proyecto cuenta con una inversión inicial de 40.000 euros y una previsión de contar con los primeros resultados “no primeiro trimestre do 2025”, según señaló Pedro Orgeira.

Orgeira: “Será un dispositivo portátil”

El responsable del proyecto, Pedro Orgeira, explicó que con él se busca “establecer unha metodoloxía que sexa aplicable a calquera concello de Galicia para que se poida determinar dunha forma sinxela, cun dispositivo portátil, cales son as súas illas de calor e cales as zonas que se poidan considerar refuxios climáticos”.

Con la herramienta resultante, detalló, todo concello va a poder realizar un mapa en el que va a poder localizar esas zonas. “Poderemos localizar nun concello, aqueles lugares onde poder refuxiarnos ante fenómenos meteorolóxicamente adversos”, afirma.

El investigador mostró su confianza en que este diseño de la metodología que recoge el convenio sea el “punto de inicio” para una segunda fase “na que ampliar e mellorar o grao de detalle das zonas, incorporando incluso imaxes de satélite”