Ourense acoge una jornada para abrazar a las víctimas de la carretera

Entre los grupos de ayuda con los que cuentan las víctimas de tráfico, está un colectivo que surgió al abrigo de la Diócesis de Ourense: la Pastoral de Carretera de Ourense. Es la primera institución religiosa de Europa que firmó la Carta Europea de Seguridad Vial y colabora con otras organizaciones en la labor de sensibilización. Celebró ayer una misa, oficiada por el obispo Leonardo Lemos, en recuerdo de los damnificados, en la iglesia de los Padres Franciscanos, en el que ellos fueron los protagonistas.

“Está pensada para todas las personas que sufrieron una pérdida en la carretera para que, a través de la fe y la oración, se sientan acogidos y abrazados”, según destacó Fernando Castro, el delegado de la Pastoral de la Carretera, el colectivo que promovió la celebración de la jornada de ayer.

El obispo resaltó que la pastoral es “una ventana de esperanza para la familias de las víctimas”, pero también enfatizó el cumplimiento de las normas para “lograr una movilidad segura” sin olvidar la importancia del acompañamiento de aquellos que sufren una pérdida.

La misa fue un homenaje pero también un acto para ensalzar el compromiso de aquellos que se involucran en la seguridad vial. Al finalizar el acto litúrgico, al teniente de la Guardia Civil de Tráfico Juan Carlos Nogueiras Iglesias se le impuso la Cruz Fidélitas, concedida por el arzobispo castrense de España, “por su compromiso con la Iglesia en Ourense y su implicación con la seguridad vial”.

Nogueiras asegura que la cruz “es un recordatorio de que el trabajo duro, la dedicación y la perseverancia verdaderamente valen la pena”. El teniente, a lo largo de su carrera profesional, ha prestado muchos auxilios en el entramado vial y hasta comunicar una pérdida tras un accidente. Pese a la formación que reciben para comunicar esas noticias, el teniente asegura que nunca se está preparado.