Pillada en Amoeiro una mujer a la que acusan de 13 fuegos

Una mujer fue pillada “in fraganti” por los técnicos de la Unidade de Investigación de Incendios Forestais (UIFO) cuando se desplazaba por el monte portando pastillas de encendido de fuegos y un mechero, “presuntamente en tentativa de provocar un incendio forestal”, aseguró ayer la Consellería de Medio Rural. Los técnicos de la Xunta llevaban semanas haciendo un operativo de vigilancia en la parroquia de Trasalba al detectar más de una docena de focos en ese tiempo. En estas hogueras encontraron, además, artefactos incendiarios y pastillas de encendido en más de media docena de ellas. La investigación se realizón conjuntamente con agentes de la Policía Autonómica de la jefatura de Ourense.

La presunta autora de estos fuegos, vecina de la parroquia, ya ha sido puesta a disposición judicial en calidad de investigada, aunque no fue enviada a la prisión y está en libertad. Su “modus operandi” era igual durante las más de tres semanas que estuvo intentando -sin éxito- provocar un incendio forestal en Amoeiro: siempre prendía a la misma hora y, al fracasar en el intento, volvía a intentarlo cada dos días.

En la parroquia había “moita inquietude nas últimas semanas polo peligro que isto ocasiona”, explica el alcalde de Amoeiro, José Luis González. El regidor añade que “xa había algunha sospeita, aínda que é preciso pillala coas mans na masa para poder acusala”. Con todo, indica que esta mujer “nunca tivera indicios de ser unha incendiaria ata este ano, non sei que lle puido pasar para tratar de prender o lume tantas veces”.

González hace hincapié en el “gran traballo” que hicieron desde la UIFO y la Policía para detener a esta presunta incendiaria. Para él, el número de intentos de incendio suben hasta 16, ya que hay algunos que Medio Rural no tiene en cuenta, aunque son de menor calado. Además, hubo algún intento de plantar “no mesmo centro da aldea, o que podería poñer en perigo a multitude de persoas”. Así, González espera que “a xustiza actúe” y reconoce estar tranquilo porque “xa está atrapada e vai sentarse diante dun xuíz”.