Al CD Barco le sobran siete minutos (1-2)

El Centro de Deportes Barco volvió a quedarse con la miel en los labios tras caer por 1-2 ante el Gran Peña en un encuentro en el que los de Lino Estévez ofrecieron una buena imagen, pero acabaron pagando muy caro jugar toda la segunda mitad con un hombre menos por la expulsión de Rabil justo antes del descanso.

El partido comenzó con un Gran Peña decidido a tomar la iniciativa y generó peligro con dos llegadas claras en los minutos 1 y 13 que obligaron a Imanol a intervenir con seguridad. Tras esos primeros compases, el Barco fue creciendo en el encuentro. Primero lo intentó en un saque de esquina, y más tarde en un centro lateral de Rabil que Sidibé donde Asier, meta visitante, respondió con buenos reflejos.

Los de Lino Estévez continuaron insistiendo, y antes del gol dispusieron de una nueva ocasión que el portero del conjunto vigués envió a córner. En el minuto 40 llegaría el premio: Sidibé, muy activo durante todo el encuentro, se adelantó al primer palo para rematar un saque de esquina y colocar el 1-0 en el marcador. Poco después, el propio delantero pudo ampliar la ventaja en un mano a mano, pero Asier volvió a negar el tanto con una gran parada.

El encuentro se torció justo antes del descanso. Rabil, que ya había visto una amarilla, llegó tarde a una entrada sobre un jugador del Gran Peña y vio la segunda cartulina. Expulsión justa, tonta y un mazazo para el Barco, que se vio obligado a afrontar toda la segunda parte con un hombre menos.

En inferioridad, los de Lino Estévez apostaron por cerrar líneas y defender con orden, táctica que dio resultado. El Gran Peña sin hacer un juego esplendoroso, se dedicó a generar peligro en centros laterales bien defendidos por la zaga local, siendo el ex de la UD Ourense, Gastón Cellerino, uno de los principales peligros para la defensa valdeorresa. La mejor ocasión visitante antes de la remontada fue una gran volea en el minuto 63 a través de Ginto que Imanol detuvo con seguridad.

Aun así, el Barco no renunció al ataque y pudo sentenciar en el minuto 77, cuando un centro lateral acabó con un remate de cabeza de Manu Rodríguez para rozar el segundo tanto. Pero el fútbol no perdona: en el minuto 83, André aprovechó un envío desde la banda para conectar un disparo cruzado que supuso el 1-1.

En ese momento el técnico local decidió dar entrada a Brian Prada para “mantener lo que tenemos”. No llegó a entrar el ex del Noia al terreno de juego y el Gran Peña, tras aprovechar un fallo defensivo, culminaba la remontada gracias al gol de Amet. En ese momento el Barco quemó sus naves, dio entrada a Prada y al jugador del filial, Rúa, pero las imprecisiones y las prisas condenaron a un conjunto que suma dos derrotas consecutivas. Para la semana nueva oportunidad de sumar los 3 puntos, será ante el siempre difícil filial del Lugo en la ciudad amurallada.