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30 MILLONES DE EUROS
El Gobierno invertirá 30 millones de euros en la resignificación del Valle de Cuelgamuros, con el objetivo de transformar el complejo en un espacio de memoria democrática. Del presupuesto total, 4 millones se destinarán al concurso de ideas y la redacción del proyecto, mientras que los 26 millones restantes financiarán la intervención arquitectónica, la museografía y la construcción de un centro de interpretación en la explanada de acceso a la basílica.
Fuentes del Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática han subrayado la importancia de que el proyecto sea llevado a cabo por un equipo multidisciplinar, que aporte una "nueva mirada" anclada en los valores constitucionales.
En los próximos días se lanzará un concurso internacional de ideas, en el que podrán participar equipos multidisciplinares formados por arquitectos, historiadores, paisajistas, artistas y expertos en museografía, entre otros. Los proyectos se presentarán de forma anónima y serán evaluados por un jurado independiente, compuesto por profesionales de reconocido prestigio y un representante de la Iglesia, en este caso, el delegado de Liturgia del Arzobispado de Madrid, Daniel Alberto Escobar Portillo.
El proceso de selección contará con dos fases:
El resultado del concurso se conocerá en septiembre de 2025. Tras ello, se prevé un plazo de ocho meses para la redacción del proyecto definitivo, con el objetivo de licitar las obras antes de finalizar 2026.
El plan del Gobierno contempla la construcción de un museo o centro de interpretación para ofrecer un relato histórico plural e inclusivo del Valle de Cuelgamuros. Para su diseño, el Ministerio de Vivienda ha señalado como referencia diversos monumentos internacionales de memoria, como:
El objetivo es que el espacio se convierta en un lugar de encuentro, reflexión y actividad, con un enfoque respetuoso, sostenible y consciente de su legado histórico.
Para poder lanzar este proyecto, el Gobierno ha alcanzado un acuerdo con la Iglesia, dado que la basílica es un lugar de culto y no se pueden tomar decisiones unilaterales sobre su uso. Como parte del acuerdo, se garantiza que:
Desde la Archidiócesis de Madrid han señalado que cualquier intervención dentro del templo deberá respetar los criterios litúrgicos y su finalidad religiosa.
El Gobierno ha asegurado que "jamás" contempló la demolición de la gran cruz del Valle, ya que consideran que es un elemento clave para explicar el nacionalcatolicismo y el contexto en el que se construyó el monumento.
Sin embargo, subrayan que la resignificación del Valle debe incluir una explicación histórica clara, donde se informe a los visitantes sobre el uso de trabajo forzado en su construcción y su función como símbolo del régimen franquista.
El proceso de transformación del Valle de Cuelgamuros ha estado acompañado de diversas acciones previas, como:
Actualmente, el Gobierno sigue trabajando en la dignificación de los restos de los más de 33.000 fallecidos en la Guerra Civil enterrados en el Valle, con una intervención especial en las criptas para mejorar la conservación y clasificación de los restos.
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