Finca Míllara abre temporada con su espacio gourmet

Y comer

La inauguración del nuevo espacio llega con el paulatino retorno a la normalidad, a medida que nos vamos liberando de las restricciones de la pandemia

Bodega de la Finca Míllara
Bodega de la Finca Míllara

A Millara es mucho más que una bodega. Ya lo era cuando sus propietarios pusieron en marcha el proyecto, con una finca de 300 hectáreas y una aldea medieval con casi una treintena de casas cuya recuperación se convirtió en uno de los objetivos.

Bodega, viñedo, entorno, la aldea... ahora se ha sumado al conjunto, de gran interés desde el punto de vista vitivinícola y enoturístico, el espacio gourmet, como un elemento más que contribuye a darle a la viticultura heroica de la Ribeira Sacra un valor adicional, tan importante como el vino que con gran maestría elaboran en su bodega.

La inauguración del nuevo espacio llega con el paulatino retorno a la normalidad, a medida que nos vamos liberando de las restricciones de la pandemia.

Coincide la apertura de este nuevo espacio con la incorporación de un nuevo enólogo al cuerpo técnico de la bodega. Se trata de Julio López Mourelle, que acumula en su trayectoria profesional una dilatada experiencia que comenzó en el Valle de Napa, en California, tras haber realizado un master en enología y viticultura en la Universidad de California. Al frente del equipo técnico se encuentra, como enólogo y viticultor Cuco Luna, hombre que ha marcado la línea a seguir tanto en la viña como en la bodega y lleva siendo el alma mater de sus vinos desde su incorporación a un proyecto que desde el pasado 2020 cuenta con la certificación de Galicia Calidade en todos sus vinos.

El paisaje, con los cañones del Miño como elemento principal, la pendiente del viñedo y las características del suelo, de naturaleza pizarrosa conforman parte de la esencia de los vinos de Finca Míllara, al igual que sus variedades autóctonas.

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