La presidenta de Honduras denuncia un golpe con la participación de un expresidente

La presidenta de Honduras, Xiomara Castro, ha denunciado este martes un "golpe" contra su Gobierno en un momento de incertidumbre en el país ya que sigue sin conocer al ganador oficial de las elecciones presidenciales celebradas el pasado 29 de noviembre. Castro apunta que en este golpe estaría implicado el expresidente Juan Orlando Hernández, que recibió un indulto del presidente estadounidense, Donald Trump, a pesar de haber sido condenado a 45 años de prisión por delitos de narcotráfico.

La actual presidenta ha pedido al pueblo hondureño "respaldo consciente y pacífico" ante la posible llegada de Hernández al país centroamericano. "Informo con responsabilidad histórica de que, a partir de información de Inteligencia verificada, Juan Orlando Hernández, perdonado en Estados Unidos, planifica su ingreso al país para proclamar al ganador de las elecciones", ha alertado a través de un comunicado publicado en la red social X.

Castro ha acusado directamente al exjefe de Estado hondureño de planear "una agresión orientada a romper el orden constitucional y democrático a través de un golpe contra el Gobierno". Por ellos, ha instado a "la población, los movimientos sociales, colectivos, organismos de base, militancia y ciudadanía" a concentrarse de manera urgente y pacífica en Tegucigalpa, "para defender el mandato popular, rechazar cualquier intento golpista y hacer visible ante el mundo que aquí se gesta un nuevo golpe".

El escrutinio electoral en el país se encuentra paralizado desde hace días en el 99,80% escrutado, con ventaja para el candidato Nasry Asfura (Partido Nacional), con una ventaja superior a un punto y de más de 40.000 votos sobre Salvador Nasralla (Partido Liberal). Tanto el partido de Nasralla como el oficialista LIBRE -al que pertenece la propia Xiomara Castro y la candidata Rixi Moncada- han denunciado alteraciones en el escrutinio que, además, está pendiente de un nuevo recuento de 2.800 actas que se consideran controvertidas y que podrían suponer un vuelco en el resultado. Este recuento especial no ha podido iniciarse por graves disturbios en las proximidades del centro logístico de Tegucigalpa donde debe llevarse a cabo.

Intervención de Trump

La propia presidenta Xiomara Castro acusó directamente al presidente norteamericano, Donald Trump, de haber intervenido en las elecciones. Antes de los comicios Trump se pronunció abiertamente en favor del candidato Nasry Asfura y advirtió que estaría vigilante sobre el escrutinio electoral. Asfura figuraba en segunda posición en el escrutinio a escasa diferencia de Nasralla pero, cuando el recuento alcanzó el 60%, se produjo un vuelco y Asfura pasó a encabezarlo siempre seguido a escasa distancia por Nasralla. La Comisión Nacional Electoral tiene de plazo hasta el 30 de diciembre para proclamar un ganador de las elecciones.

Desde la Misión de Observación de la Organización de Estados Americanos (OEA) apuntan a "demoras y deficiencias técnicas" en el proceso electoral, pero apunta que no ha habido "dolo" ni "manipulación". En esta línea han destacado que las actas físicas están custodiadas por las autoridades, por lo que los fallos informáticos "no implican por sí mismos una acción fraudulenta"