Cuando el tiro sale bien

En la mirilla de la octava jornada de los Juegos de Tokio aparecían como eventos destacados la final de 100 metros femenino con la posibilidad de asaltar el récord olímpico por las marcas en las series de clasificación en una pista de vértigo, el gallego Adrián Ben buscando plaza en las semifinales de 800 metros, Pablo Carreño discutiendo a Dojkovic el bronce en tenis y la selección de fútbol jugándose la semifinal contra Costa de Marfil.

Cumplió el ochocentista con el pase directo por el tercer puesto en su serie (1:45.30), se salió con la prensa: "Si me dejas decir dos palabras, gracias a todo el mundo que se ha quedado para verme, es combustible para la competición y si yo estoy aquí cualquier puede estar y cumplir sus sueños". Poco después, en la retransmisión de TVE anunciaron que dos españoles estaban compitiendo en el foso de tiro. "Van primeros y si llegan a la final tendremos señal". Parece una desconsideración que para que te vean en casa por la tele después de cinco años de entrenamiento haya que garantizar medalla. Los tiradores Fátima Gálvez y Alberto Fernández subieron el primer oro al medallero al imponerse a San Marino en foso mixto y dejaron al deporte una lección de naturalidad tras el éxito soñado. Alberto se lo tomó como un juego y lo pasó "pipa".

Hay ocasiones en las que el tiro sale bien cuando menos se espera. Más tarde le sucedió a Pablo Carreño. Desquició al número 1 de la ATP para colgarse un bronce que celebró como un título. También estaba la selección de fútbol eliminada al recibir un gol en el minuto 90, pero dos minutos después Rafa Mir, que acababa de entrar, mandó el partido a la prórroga y se desató con dos tantos más. Jugará la semifinal contra Japón.

En Tokio, 33 años después, la jamaicana Elaine Thompson-Herah pulverizó con el segundo mejor registro de todos los tiempos (10.61) la mítica plusmarca olímpica en las piernas de Florence Griffith Joyner desde los Juegos de Seúl 88. Repite el oro de Río seguida de Fraser-Pryce (10.74) y Shericka Jackson (10.76) en un podio histórico para Jamaica. Los 10.49 de Florence ya parecen a tiro.