Pilar Cernuda
LAS CLAVES
Sánchez, cuestionado por los suyos pero inamovible
TRAZADO HORIZONTAL
Sólo falta Ucrania para completar el triángulo de la paz mundial. Todo se andará. Pero de momento el Plan de Trump funciona como una fórmula de pacificación en Gaza más eficaz que el boicot a la Vuelta Ciclista, la flotilla vacacional, el reconocimiento del Estado palestino al margen de la UE o el decreto reversible del embargo de armas a Israel. Pese a todo, allí estuvo Pedro, en Egipto, para hacerse la foto, después de su pataleo antisemita y de ignorar el nobel de la paz concedido a María Corina Machado. Merece reproche que el estadista de la Moncloa acudiera a hacerse un posado con su enemigo Donald después de ponerle a caldo mientras el líder del mundo forcejeaba un saludo condescendiente de tira y afloja de manos y bromeaba con el PIB español sobre el gorroneo de Sánchez en la OTAN por negarse a una inversión del 5 por ciento en Seguridad y Defensa. Pero más alarmante y deplorable es aún que el Gobierno español, empezando por Pedro Sánchez, niegue la felicitación pública a María Corina Machado (dos ministros felicitaron en privado a Edmundo González) tras la concesión del nobel de la paz, conociendo como se conocen las conexiones de los regímenes sanchista y narco-bolivariano. La explicación de semejante desprecio señala sospechosamente los negocios de Zapatero con el régimen de Maduro y con el caso Delcy sobre el que el sanchismo dio varias versiones sin acertar a explicar de forma convincente el episodio de las maletas en el aeropuerto de Barajas en el que metió cuchara Ábalos y la facilidad con la que Koldo accedía a la vicepresidenta venezolana.
La paz sea contigo se ha convertido en una aspiración sanchista irreal y delirante, tras deslizar el ministro Torres que su amo Sánchez podía ser digno del nobel de la paz. Semejante dislate requiere de mayor liderazgo y peso diplomático en el mundo que el de Sánchez, quien además de despreciar con su enanismo parvulario a la OTAN, se permitió acudir de figurante a la firma del Plan Trump en Sharm el Sheij, cuando en realidad ese acuerdo de paz gripó su estrategia de propaganda, relato y política electoralista interna a costa de los bombardeos de Israel tras el ataque terrorista de Hamás para tapar con esa cortina de humo sus miserias familiares, de partido y de gobierno que investigan los tribunales. Que se sepa, nada dijo Pedro de "genocidio" en Egipto, y menos delante de Trump, ante el que puso la mejor de sus sonrisas de joker, la sonrisa que guarda para Feijóo cuando el líder de la oposición le afea en el Congreso la corrupción que asola al régimen sanchista.
“Más alarmante y deplorable es aún que el Gobierno español niegue la felicitación a María Corina Machado”
Tampoco Trump escapa a la aspiración ansiada del nobel de la paz, pero tras su fracaso con Putin falta por ver si el plan de la Casa Blanca es duradero. En cualquier caso, es de justicia reconocer que Trump ha hecho ya tantos méritos como Obama, quien sí recibió el nobel de paz de forma prematura sin detener ninguna guerra. Se puede decir que el nobel de Obama fue una concesión a la corrección política de pregresía pacifista, mientras que el nobel de María Corina Machado es un premio a la lucha por la libertad y la democracia en Venezuela con la que el Gobierno español no comulga por razones obvias y oscuras que quedan bajo sospecha como los sobres y las bolsas llenas de euro-chistorras. Esos fajos de billetes de Ábalos antes de negarse a declarar en el Supremo y la confesión preventiva de Pedro reconociendo cobros en efectivo "en alguna ocasión" son una prueba de cargo.
La paz sea contigo, más allá de un saludo religioso, es un deseo de convivencia mundial imposible de implantar en la totalidad de la geopolítica global. La paz sea contigo obedece a la noble aspiración de acabar con las bombas y el sometimiento de los pueblos. La paz sea contigo se firmó en la órbita islámica como "As-salamu alaykum" de buena voluntad que el tiempo hará o no real. La paz sea contigo es un poderoso mensaje político contra las dictaduras del mundo y los fraudes electorales que los observadores internacionales certificaron en Venezuela sin que Sánchez y ZP lo censuraran. La paz sea contigo es un mensaje de orfandad para el sanchismo, que lejos de pacificar el mundo, debe pacificar España con algo más que concesiones al chantaje separatista. La paz sea contigo requiere en nuestro país de regeneración democrática y concordia para vencer la polarización, el frentismo y el guerracivilismo que se promueve desde el poder para obtener rédito político y electoral. La paz sea contigo es un lujo sólo al alcance de quienes fomentan la igualdad entre ciudadanos y territorios. La paz sea contigo es una inmigración organizada, tener Presupuestos cada año y una gobernanza verdadera de las mayorías sin que las minorías impongan el saqueo del Estado en su provecho. La paz sea contigo debe ser la verdadera finalidad de la política, la auténtica separación de poderes, el sometimiento de todos al imperio de la ley y al Estado de Derecho como garantes de la democracia. En definitiva, que la paz sea contigo y con tu espíritu, cuando el espíritu es honestidad y verdad.
El CIS de Tezanos ha completado la cuadratura del círculo. Dice el socialista Tezanos, quiero decir el sanchista José Félix, que el PSOE le saca 15 puntos al PP en intención de voto, que es como certificar que la sociedad española aprueba la corrupción, la amnistía, el blanqueamiento de los ERE, los pactos con golpistas y herederos de ETA y otras oscuras golondrinas del mandato de Pedro Sánchez. José Félix Tezanos se ha convertido en la muleta de Pedro, en el presidente de su club de fans, en la cheerleader de la manipulación demoscópica con la que inducir la simulación de un estado de opinión electoral con el que alargar el mandato y preparar el terreno de la permanencia en el poder a costa de inflar a Vox y minimizar al PP. A los españoles les ha condenado José Félix a cadena perpetua del sanchismo, sin posibilidad de alternancia ni de cambio. De eso se encarga Tezanos, en contra de todas las encuestas privadas publicadas hasta ahora, usando dinero público para cocinar un CIS tendencioso y sin credibilidad. ¿O por qué Sánchez no convoca elecciones si el CIS es cierto? La sopa de letras permite que la chistorra presunta del sanchismo se transforme en la CIStorra de Tezanos.
Voy a discrepar sin escatimar el impacto torero de Morante en la historia de tauromaquia mundial. Al de la Puebla le regalaron la segunda oreja en Las Ventas, que le permitió salir por la puerta grande y sorprender con una retirada por sorpresa al cortarse la coleta en un impulso de valor y llanto que el torero matizó después con un "me la quité, no me la corté". Se verá si un día vuelve el maestro de la templanza y del arte, del toreo a cámara lenta, de la quietud ante los pitones de la muerte en lucha titánica contra la enfermedad mental. Si Morante de la Puebla fuera político, se plantaría delante de los Mihuras de la vida pública para resolver los problemas en faena noble, y no como maletilla cutre cual los delincuentes de la corrupción. En la vida pública española hace falta más templanza torera, más valor y arte, más arrimarse al toro y menos asegurar el voto al dictado de las encuestas. Morante de la Puebla se levantó tras un revolcón severo del toro y dejó claro que es uno de los grandes. La presidencia de la plaza le ayudó con la segunda oreja, pero eso no le resta grandeza. La grandeza de la que carece el actual poder de la cobardía huidiza de Paiporta.
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