El azahar de China

Ejemplar de Pittosporum tobira.
Ejemplar de Pittosporum tobira.

Pittosporum tobira, conocido popularmente como azahar de China, azarero, pitosporo o pitosporo del Japón, y denominado en gallego con el nombre de pitósporo, es un arbusto siempreverde perteneciente a la familia de las Pittosporáceas, originaria del este de Asia, concretamente de China, Corea y Japón. Desde allí, fue introducida como planta ornamental en muchas regiones del mundo, asilvestrándose en algunas de ellas.

El pitósporo puede llegar a convertirse en árbol, alcanzando hasta diez metros de altura. Su copa es redondeada. Su tronco es tortuoso y está muy ramificado desde la base. Su corteza es de color pardo grisácea. Sus hojas son oblongas o en forma de espátula, con el borde entero o a veces curvado hacia abajo y el ápice redondeado; son lampiñas, lisas, coriáceas y alternas, aunque tienden a agruparse en el extremo de las ramas; son de color verde oscuro y brillantes por la parte superior y verde claro por la inferior; en dicha parte superior presentan un nervio medio muy marcado y de color amarillo, y otros nervios laterales muy finos.

Sus flores son estrelladas, de pétalos gruesos de color blanco amarillento o crema y se presentan formando inflorescencias a modo de sombrillas o umbelas en el extremo de la ramas, con pedicelos vellosos; son muy perfumadas.

Florece en primavera desprendiendo un aroma parecido al del azahar. Sus frutos son cápsulas redondeadas, casi leñosas, verdosas al principio y marrón amarillentas en la madurez y ligeramente pubescentes, con varias valvas en cuyo interior se albergan las semillas de color pardo oscuro que están envueltas en una sustancia viscosa blanquecina.

Es una planta de crecimiento rápido, que se reproduce bien por semillas o también por estacas, prefiriendo lugares soleados o de media sombra y suelos bien drenados. Las estacas con hojas enraízan con facilidad. Puede desarrollarse en bosques, zonas litorales y márgenes de caminos y carreteras.

El nombre genérico, pittosporum, deriva del griego pitta que significa “resina” y sporos que significa “semilla”, haciendo con ello alusión a sus semillas que están rodeadas de una sustancia viscosa. El adjetivo tobira es el nombre original de la planta en Japón.

Por su denso follaje y el aroma de sus flores es muy utilizado en jardinería. Además, por su resistencia a la contaminación atmosférica se emplea para formar setos en zonas urbanas. Y por su resistencia a la sequía, a los vientos y a la salinidad, se usa frecuentemente para formar setos en zonas costeras, como también cortavientos en las mismas playas. Ejemplo de ello es el Parque Natural de las dunas de Corrubedo, situado entre las rías de Arousa y la de Muros e Noia, donde encontramos numerosos pies de esta especie diseminados y naturalizados, nacidos de semillas posiblemente procedentes de algún jardín cercano. También se pueden observar en la senda litoral de A Guarda, en el tramo que va desde la desembocadura del Miño hasta el puerto de A Guarda.

Asimismo, por sus cualidades decorativas es una especie adecuada para el arte topiario, pudiendo modelarse a través de la poda y darle formas artísticas. Tanto los tallos, como las hojas y frutos se utilizan en floristería. El néctar de sus flores es muy apetecido por las abejas. Por sus eventuales propiedades antisépticas y antiinflamatorias fue usado en la medicina tradicional.

En Galicia existen otras variedades de Pittospora tobira que por su valor estético y paisajístico son muy utilizadas en jardinería como la “nanum” excelente para setos bajos, bordes de jardines y macetas por su pequeño porte; la “compactum” de muy denso follaje y la “variegatum” con el borde blanco. También se suele cultivar el Pittosporum tenuifolium o pitósporo rizado, originario de Nueva Zelanda, que por sus flores purpúreas y su follaje ondulado es apreciado en floristería. La pitóspora también se cultiva como bonsái.

En algunos países está catalogada como una planta invasora, fenómeno al que contribuyen las aves que diseminando las semillas aumentan su expansión. Esta propagación empobrece la biodiversidad de las plantas autóctonas, con las cuales compite eliminándolas.

Contenido patrocinado

stats