El presidente francés, François Hollande, dio garantías ayer en Israel de que considera el programa nuclear iraní una amenaza para el mundo y dijo que no apoyará un acuerdo hasta asegurarse de que Teherán no persigue el arma atómica. 'Francia no cederá, ni se comprometerá en la cuestión de la propagación de armas nucleares, y mientras no estemos convencidos de que Irán ha renunciado a sus aspiraciones para tener el arma nuclear mantendremos nuestra postura', defendió a su llegada a Tel Aviv al comenzar una visita de tres días, la primera a Israel y a los territorios palestinos como jefe de la República.