Desde Cáceres para volver a sus raíces en O Covelo

PRESIDENTE DEL BANCO DE ALIMENTOS

Juan Carlos Fernández Rincón es el presidente del Banco de Alimentos de Cáceres desde 2013 y aprovechará su estancia en Ourense para reconectar con sus raíces gallegas.

Juan Carlos Fernández Rincón en Ourense.
Juan Carlos Fernández Rincón en Ourense. | B.L.

Está en Ourense para asistir al 28 congreso anual de Bancos de Alimentos, que se celebrará en la ciudad este jueves, y que estará presidido por la reina Solía. Aprovechando este viaje, Juan Carlos Fernández Rincón reconectará con la tierra de sus padres, ambos gallegos, y más concretamente con la de su familia paterna, que es originaria de O Covelo, una pequeña aldea del concello de Xunqueira de Ambía.

“A mí me hizo mucha ilusión cuando designaron a Ourense para acoger el congreso”, ya que “hacía mucho que no venía por aquí y a mi padre le tenía mucha devoción”. “Mi padre era militar, como yo”, explica, “y me dijo que fue el hombre más feliz del mundo cuando me dijo que estaba muy orgulloso de que siguiese sus pasos”. Juan Carlos fue coronel de Infantería del Ejército Español.

Juan Carlos con sus padres y hermanos en Cáceres.
Juan Carlos con sus padres y hermanos en Cáceres.

Juan Carlos pasó muchas horas conversando con su padre, en las que escuchaba con total fascinación cómo era Galicia y la vida que tenía aquí antes de tener que marcharse por su trabajo. De su padre heredó una expresión, que según explica, siempre llama la atención fuera de Galicia. “Cuando me acerco a una mesa, y me quieren dejar el sitio, yo les contesto ‘déjate estar’, algo que no entienden”. Esta expresión, “deixate estar”, se usa frecuentemente en la comarca de la que proviene su padre.

Aunque el presidente nació ya fuera de Galicia, siempre ha tenido una “relación muy estrecha”. “Yo tengo amor por Galicia y es una Comunidad Autónoma que tiene mucho arraigo para la gente que está fuera”. “Los hijos de militares nacemos cada uno en un sitio”, explicó, ya que él y sus cinco hermanos nacieron todos fuera.

La última vez Juan Carlos que estuvo en Galicia fue haciendo el Camino de Santiago, “los hice solo, porque prefiero ir andando y recordando, metiéndome en el ambiente gallego”, explica, “me hacía mucha ilusión”. “Para mí fue un encuentro conmigo mismo muy grande”.

“Estoy loco por disfrutar de Ourense, por pasear y comer”, dijo con una gran sonrisa, “tengo ganas de bañarme en las termas y disfrutar de la naturaleza”, apuntó, ya que “Cáceres es una zona muy seca”. Hoy hará una escapada a Santiago de Compostela, para “darle un abrazo al Santo, que no me puedo ir sin hacerlo”, y se acercará a O Covelo, para volver a la tierra de su padre.

El amor por Galicia de este cacereño con alma gallega se refleja en todos los ámbitos de su vida, ya que guarda relación con muchos paisanos que también están viviendo fuera. “Uno de mis buenos amigos de Cáceres es ferrolano”, explica, “parece que la vida no quiere que olvide que mis orígenes son gallegos”. Durante su infancia, el caldo gallego se comía una vez por semana, “soy incapaz de acordarme de mis padres sin pensar en Galicia”. Otra casualidad es que lo bautizó “monseñor Temiño, que su hermano fue compañero de mi padre”, quien fue obispo de Ourense.

El ex coronel apunta que la gastronomía y el entorno se “potencian” con el carácter de la gente, “si el que te sirve y el que está al lado son gente encantadora, eso se va sumando y se funde en algo que me da envidia de lo bien que se vive aquí”.

Contenido patrocinado

stats