Una de las mejores cosas de internet no es la Wiki, ni el acceso a la información a nivel planetario, ni estar en contacto constante ¡menuda pesadilla!, con quien nos apetezca o no. Tampoco tener porno en casa sin que el kioskero o los vecinos lo sepan. Ni que podamos fabricar una bomba con cuatro bobadas que todos tenemos en la cocina sin llamar a MacGyver para que nos explique cómo se hace.
No. Una de las mejores cosas de internet es que nos ha librado de la televisión. Ya no tenemos que tragarnos "Sálvame", ni "First Dates", "La Noria", "El gato al agua", "Hombres, mujeres y viceversa" o "¡Qué tiempo tan feliz!". Gracias a La Red podemos ahorrarnos ese trabajo ya que La Red se encarga de seleccionar y mostrarnos los peores (o mejores según se vea, generalmente los peores) momentos de dichos programas que merecerían algún premio-antipremio ad hoc.
Yo casi no veo la tele, internet es mejor. En internet juntan toda la porquería, la seleccionan y te ponen los peores momentos (o mejores según se vea, generalmente los peores). Yo bendigo a todos esos programadores, expertos, bloggeros, becarios, robots informáticos, programas automatizados, etc., que pasan horas y horas visionando cantidades ingentes de basura para elegir la más reseñable y ponerla a la vista de todos. ¡Cielos!, hace años teníamos que hacer eso nosotros mismos, sin ayuda. Esto es un avance.
Recientemente he tenido que cambiar de móvil, el que tenía que era una antigualla hizo kaput. Como soy un caso raro entre mis amigos ya que casi no hablo por teléfono, no utilizo WhatsApp ni aplicaciones y tampoco internet ni correo electrónico en la calle (en casa sí, tengo de todo todo el día y estoy permanentemente conectado), al final compré un Nokia 230, un modelo de la marca finlandesa que pueden encontrar fácilmente en internet si teclean ustedes "el teléfono más tonto del mundo" (esto es un piropo). Es un móvil superliviano, con 22 horas de conversación sin recarga, con todas las aplicaciones como bluetooh, doble cámara, doble SIM, internet, WhatsApp, correo, etc. Lo que quiera el usuario. Y con una pantalla de tres pulgadas pero que no es táctil y se maneja con teclado físico. Una rareza. Las opciones de internet, aplicaciones, etc., las tengo todas desconectadas, así que llevo el teléfono en el bolsillo como si llevara uno de baquelita, solo que pesa y ocupa mucho menos que un smartphone. Cuando mis amigos y conocidos se burlan de mí siempre les contesto lo mismo: perdona, chico, pero no lo entiendes, estoy más conectado que tú desde hace casi treinta años, y cuando salgo a la calle quiero ir con las manos en los bolsillos, charlar, ver el paisaje y mirarte a los ojos. No quiero hacer fotos, ya fui fotógrafo profesional hace años y además de los buenos. Ahora solo quiero pasear. Y creo que cuando se lo explico lo entienden. ¿Ustedes lo entienden?
