Opinión

Pokémon Go

La realidad virtual va tan rápido que Pokémon Go, la última locura en videojuegos para móviles, está pasando de moda a la misma velocidad con que se convirtió en un fenómeno mundial: sic transit gloria mundi.

Lo último, que ya empieza a desbancar a Pokémon Go en mercados de referencia como el japonés, el inglés o el americano, es un nuevo juego aun más adictivo llamado Maho No Neko, nombre que podría traducirse libremente como "Gato Mágico". Un juego, como ya habrán adivinado ustedes, japonés.

Maho No Neko ha sido diseñado por Konami, una de las compañías, junto con Nintendo, más fuertes del mundo en este tipo de productos. Konami se hizo famosa hace años por desarrollar Metal Gear para PlayStation, aunque últimamente la empresa no pasaba por sus mejores momentos. Pero gracias al éxito de Maho No Neko las acciones de Konami se revalorizaron el pasado lunes en más de un 130% en la bolsa de Tokio.

Técnicamente Maho No Neko es muy similar a Pokémon Go, y al igual que este combina el uso de las cámaras de los smartphones y sus sistemas GPS con realidad aumentada. Pero Maho No Neko va más allá. Al descargarse la app, el usuario acepta que la aplicación no solo rastree toda su actividad en redes sociales como Facebook, Twitter y otras, sino que pueda adueñarse de imágenes, textos, etc., y utilizarlos libremente. Así Maho No Neko puede incluir toda clase de inesperadas y sorprendentes variaciones en el juego, a modo de propuestas personalizadas.

El funcionamiento de la aplicación es también parecido a Pokémon Go. Consiste en la caza y captura de personajes virtuales a través del smartphone, y se puede practicar en cualquier sitio aunque lo interesante es hacerlo en áreas con más jugadores, para interactuar también con ellos. La novedosa diferencia de Maho No Neko es que ofrece más de 356 millones de personajes virtuales que van desde seres de ficción o dibujos animados hasta personajes reales o irreales, o del cine, la televisión, la literatura... De hecho el nombre Maho No Neko es un guiño al Gato de Cheshire de Alicia en el País de las Maravillas y el propio icono de la aplicación lo homenajea: un minino con una gran sonrisa.

Las combinaciones entre esos 356 millones de personajes junto con la información extraída de las redes sociales del usuario ofrecen posibilidades infinitas. Por ejemplo, si usted es un friki de Star Trek, con suerte podría capturar a un Klingon o al propio almirante Kirk; o simplemente o tal vez no tan simplemente a su primo Manolo que vive a un par de manzanas o en Honolulú. Todo es posible. ¿Todo? No. Un representante de comunicación de la compañía aclaró hace días desde Buenos Aires que ningún jugador, ni aun viviendo varias vidas y dedicando las veinticuatro horas del día al juego podría alcanzar nunca el nivel 112, el más alto.

Creo que ese tipo se apellida Borges. No estoy seguro.

Te puede interesar