Un menor denuncia acoso reiterado en el IES de Allariz

“El jueves pasado una compañera me dio un puñetazo en el estómago, nadie hizo nada y al día siguiente se metieron conmigo porque me había pegado una chica; me gritaban maricón”, relata un joven de 17 años que, presuntamente, lleva dos años sufriendo acoso escolar en el Instituto de Allariz.

El supuesto acoso o buylling comenzó en 2019. “Le pegaron y tras tener los informes médicos, mi hijo acudió a denunciar y su agresor fue sancionado”, explica su madre, M.J.A. Este episodio no es un caso único en la vida del niño. Según su progenitora: “Le volvieron a agredir poco después, el niño llegó a casa con la chaqueta ensangrentada, pero en el instituto no se tomó ninguna medida”.

Tras la última y tercera agresión, la familia decidió volver a instancias policiales: “Mi hijo tuvo una lesión abdominal. Tengo el informe médico que lo verifica pero en el colegio insisten en que es mentira”, explica M.J.A. El menor relata que le pidió un bolígrafo a su compañera y esta respondió con agresividad, más tarde asestándole un puñetazo. “Me encontré mal y pedí irme a casa”, explica el joven. Tras ello acudieron a denunciar. Además, el año que viene se cambiará de colegio para ir a un centro de la ciudad “y frenar esto de una vez”, señalan.

Según indica la familia, los supuestos insultos y agresiones comenzaron por el largo historial delictivo del padre del niño. Robos, atracos y otras hazañas hicieron famoso su nombre en la localidad y las extraordinarias circunstancias de su muerte fueron aún más comentadas. Así, el menor cada poco tiempo dice escuchar la pregunta “¿dónde está tu padre?”, en tono de burla y acoso. Su progenitora afirma que “mi hijo pequeño también está empezando a sufrir este tipo de insultos y solo tiene nueve años”.

“Todo mentira”

El secretario del Instituto de Allariz, Xosé Rodríguez, afirma que este caso “é unha falsedade. Non hai nada”, señala. “Abrimos un protocolo porque os abrimos inmediatamente e somos moi escrupulosos. Ademais temos moitas gardas e nos daríamos de conta”, explica decididamente. Sobre las peleas anteriores -una de ellas llegó a los juzgados- expone que “no fue un caso de acoso escolar, foi unha trifulca” y en cuanto a la de la semana pasada aclara que “o outro día o rapaz tivo un incidente e foi un empuxón, nin eso sequera”, señala el secretario del IES Allariz.

Rodríguez dice que en el centro investigaron el caso pero que creen que “é unha invención”. Por su parte, la Consellería de Educación confirma que “desde que se tivo coñecemento, abriuse o protocolo de acoso escolar para investigar os feitos”.

Una realidad desoladora

El menor está desanimado y desesperanzado: “Ya solo pensar en ir al instituto me agobia, siento que cada día va a pasar algo nuevo”, relata. “Ahora mismo sigo yendo por los exámenes, esto es así desde que se enteraron de quién era hijo”, explica.

La familia relata que el acoso no se queda solo en el patio del colegio, sino que también se extiende al profesorado. “Cuando se meten conmigo nadie hace nada”, además, “antes tenía el pelo largo y un profesor me obligaba a hacerme una coleta, si no lo hacía me ponía partes. Acabé cortándome el pelo por no seguir aguantando esa situación”.