El conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda, anunció ayer que el Consello de la Xunta aprobará hoy el recurso contra la norma que regula el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), para proceder al día siguiente a su presentación 'en tiempo y forma' ante el Tribunal Constitucional (TC). 'No queda otra salida', argumentó Alfonso Rueda, tras certificar que no hay acuerdo en la negociación abierta con el Estado por su actitud 'antigallega y obstruccionista'.
El anuncio de que Galicia recurrirá el FROB, cuya aplicación no queda paralizada, se produce tras semanas de estancamiento en las negociaciones entre Xunta y Gobierno sobre el recurso presentado ante el Constitucional sobre diez preceptos de la Ley de Cajas gallega. Otras comunidades también habían expresado reticencias acerca del fondo, como Madrid, Cataluña, Andalucía y Extremadura, pero el de Galicia es el primer anuncio formal de un recurso.
En su intervención, el titular de Presidencia proclamó que la Xunta 'agotó las vías de negociación' con el Gobierno central. De hecho, alegó que la última propuesta sobre el FROB elaborada por el Gobierno central es 'decepcionante', puesto que 'amplía las restricciones competenciales' previstas en la redacción original del texto, en la que 'ya se obviaba la participación efectiva de Galicia' en los procesos de reestructuración bancaria.
En concreto, Rueda explicó que el decreto-ley transformaba las 'preceptivas autorizaciones autonómicas' en cualquier proceso de reestructuración de sus cajas en 'meros informes urgentes y no vinculantes', pese a que la Ley de Cajas de Ahorro, 'al amparo del Estatuto', ratifica que la 'autorización' de una fusión es 'una competencia exclusiva' de Galicia.
En su intervención, el titular de Presidencia proclamó que la Xunta 'agotó las vías de negociación' con el Gobierno central. De hecho, alegó que la última propuesta sobre el FROB elaborada por el Gobierno central es 'decepcionante', puesto que 'amplía las restricciones competenciales' previstas en la redacción original del texto, en la que 'ya se obviaba la participación efectiva de Galicia' en los procesos de reestructuración bancaria.
En concreto, Rueda explicó que el decreto-ley transformaba las 'preceptivas autorizaciones autonómicas' en cualquier proceso de reestructuración de sus cajas en 'meros informes urgentes y no vinculantes', pese a que la Ley de Cajas de Ahorro, 'al amparo del Estatuto', ratifica que la 'autorización' de una fusión es 'una competencia exclusiva' de Galicia.
