“Somos unha vila balnearia e ese é o modelo a seguir. Unha cidade pausada”, dice Gerardo Seoane, alcalde de Verín, que hace años inició un plan de reorganización y humanización de la villa del Támega, con el objetivo de crear una urbe más ordenada y descongestionar el centro de tráfico.
“Xa quitamos bastante tráfico, pero toca seguir para ter o centro máis despexado”, dice. Calles con arbolado, grandes parques y seguir recuperando ambientalmente el entorno de los balnearios serán los objetivos, para ello es necesario y “lóxico” la creación de aparcamientos disuasorios, que permitan liberar la presión de los coches en las vías principales. “Puxemos en marcha 2.000 prazas e a resposta foi espectacular. Están cheos”.
Eso en cuanto a movilidad y zonas verdes, a nivel industrial, el gobierno municipal tiene en marcha dos zonas para industrias y agroalimentario y, otro asunto será la mejora del abastecimiento -con una nueva estación de tratamiento de agua- y el saneamiento, con la digitalización del ciclo del agua.
