Fundación San Rosendo roza los dos mil empleos en plena crisis del covid

La Fundación San Rosendo hizo pública ayer su memoria de actividades del presente año, así como su presupuesto e iniciativas para el próximo. En los resultados, destaca su crecimiento sostenido tanto en número de residencias como en presupuesto y plantilla de trabajadores. En 2021, su red de centros sumó 1.942 empleos, 51 más que el año anterior y 149 más que al inicio de la pandemia. En 2011, la Fundación contaba con 1.475. Y continúan demandando perfiles profesionales de todo tipo, “en especial, enfermeros y personal médico”.

El presupuesto de la Fundación para el año 2022 asciende a 56 millones de euros. La inversión prevista se sitúa en torno a los 1,5 millones de euros y se destinará al inicio de las obras en nuevos centros de A Coruña, Orense y Verín así como a la mejora y mantenimiento de toda la red de centros. Su presupuesto aumentó cada año desde 2011, pasando de los 42,9 millones de entonces a los 56 con los que se encara 2022.

Entre los anuncios de mayor envergadura, José Luis Gavela, presidente de la Fundación, y Julio Soto, su patrono, que fueron los encargados de presentar la memoria y explicar los próximos pasos de la entidad, destacaron que se pondrá en marcha una Unidad de Apoyo a las Personas Mayores en el centro de la ciudad.

Estará conformada por un conjunto de seis recursos asistenciales que, ubicados en un mismo entorno geográfico, pretenden prestar apoyo a las capacidades de las personas mayores en los diferentes momentos de esta etapa de la vida. La Fundación ya abrió en 2021 la vivienda comunitaria de Alfredo Romero, que supuso una inversión de 300.000 euros para reforma y equipamiento.

A este centro se le añadirán los apartamentos tutelados de Alfredo Romero y la avenida de Pontevedra (en construcción), la Residencia para válidos Alameda, la Residencia Miño y el centro para personas dependientes en la avenida de Pontevedra, que se ubicará en un edificio de próxima rehabilitación.

El objetivo, subrayan desde la Fundación, es “que las personas mayores, gracias a la coordinación de los equipos, reciban una atención personalizada en cada uno de los recursos en los que se encuentren”. También subrayan que esta unidad “supone la recuperación del patrimonio del casco histórico, dando un nuevo uso a edificaciones rehabilitadas”.

Además, desde el mes de noviembre, la Fundación San Rosendo atiende a las familias en una oficina a pie de calle en la avenida de Pontevedra, donde se implantaron medidas de accesibilidad y espacios para promover la atención individualizada.

En cuanto a la residencia de Verín, que dispondrá de 100 plazas y dará empleo a 50 profesionales, continúan los trámites administrativos para el inicio de las obras en un terreno cedido por el Concello con más de 4.000 metros cuadrados. Ya se firmó un convenio con el gobierno local y se está a la espera de la cesión del terreno. “Esperamos iniciar la construcción en el primer trimestre de 2022”, explicó Julio Soto.

Además, la Fundación se expande hacia A Coruña, donde se iniciarán obras en pleno centro, precisamente en la plaza de Ourense. Es su primer proyecto en la ciudad y se levantará a partir de la rehabilitación y ampliación de un edificio histórico, invirtiendo para ello dos millones de euros.

Sexta ola

En cuanto a la situación de la sexta ola, “actualmente tenemos 29 trabajadores positivos, por el aumento de contagios en toda la provincia, pero gracias a la vacunación masiva las complicaciones son mucho menores”, valoraron. Comenzarán a pedir el certificado covid para visitas de las familias el sábado. Solo 8 de los trabajadores siguen sin vacunar.

Cartas contra la soledad

Para evitar la sensación de aislamiento durante los meses más duros de la pandemia, los centros organizaron iniciativas de ocio sin salir de las residencias. Por ejemplo, las actuaciones en directo de bandas de música en los centros Divino Maestro (Ourense) y Nuestra Señora del Mundil (Cartelle). Además, se pusieron en marcha herramientas para combatir la soledad, como el intercambio de correspondencia entre usuarios de las residencias de Vilamarín y Maceda. Además, la conexión de los centros con la sociedad quedó demostrada con iniciativas como la campaña para vender imanes para la Isla de La Palma. La Fundación cuenta además con el Proyecto Experiencia Activa, puesto en marcha en 2014 para promover un envejecimiento de calidad mediante el disfrute de experiencias en grupo. Cuenta con el apoyo de La Región e Inditex, y participaron en sus actividades más de 2.000 usuarios de la Fundación. La pandemia hizo aún más necesaria esta iniciativa, que fomenta la autonomía e incluye talleres de gimnasia para mejorar, a un tiempo, la salud emocional y la capacidad respiratoria.