Nueva noche gélida en la provincia de Ourense, que sigue bajo los efectos del frío polar. Los termómetros volvieron a bajar y mucho en el territorio ourensano hasta alcanzar nuevas cifras bajo cero que superaron las de la jornada anterior. Hay que mirar nuevamente hacia Calvos de Randín para ver la temperatura mínima esta madrugada. En el municipio ourensano los termómetros cayeron hasta los -10,9 grados centígrados, según los datos obtenidos por Meteogalicia.
No muy lejos se quedó Manzaneda, que cayó hasta los -9,2 grados. Mientras, Carballeda de Valdeorras, que registró el día anterior la mínima más baja, esta vez se quedó en los ocho grados negativos.
Además, Verín y Viana do Bolo llegaron al umbral de los -8,6 grados, mientras que Baltar alcanzó los -8,7.
En lo que se refiere a la ciudad, a Ourense, el termómetro no bajó tanto como la noche anterior y se quedó en los 1,3 grados.
En cuanto a las carreteras, la circulación volvió a abrirse en ñla OU-122 a su paso por Casaio, en ambos sentidos entre los kilómetros 20 y 26.2, que permanecía cortada por la nieve desde el fin de semana. Según los datos ofrecidos por la DGT a primera hora de esta mañana, en Galicia solo hay dos carreteras ya afectadas por la nieve: la AC-101 en As Pontes y la LU-633 en Pedrafita.
