Los usuarios de la céntrica calle Circunvalación, en A Rúa, comprueban desde hace días cómo el firme de la calzada comenzó a hundirse. Estas deficiencias preocupan en el Concello, máxime cuando los trabajos finalizaron a finales de 2010.
El alcalde 'popular', Avelino García Ferradal, anunció que efectuará una reclamación ante la empresa que realizó la obra al objeto de que corrija las deficiencias. 'Si dejamos pasar un año, tendría que hacerse cargo de los arreglos el Concello', dijo.
El proyecto causante de este malestar incluyó la renovación de las conducciones de abastecimiento y saneamiento, así como la renovación del asfalto de la calle. El presupuesto fue de 280.000 euros y fue adjudicado a la empresa Hordescon, en un plazo de dos meses. La financiación fue aportada por el Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local, del Ministerio de Política territorial y Administración Pública.
La aparición de defectos antes de que pasase un año desde el final de la obra no es la única polémica que originó la ejecución de este proyecto. Primero fue el retraso en la finalización de unos trabajos que tenían un plazo de ejecución de dos meses, que comenzaron en el mes de junio de 2010 y que en septiembre motivaban las primeras quejas de Avelino García, entonces en la oposición.
Pocos días después de que la maquinaria abandonase la calle, a principios de diciembre del año pasado, la oposición volvió a cuestionar las obras, en esta ocasión por no haber contemplado la colocación de las conducciones de gas propano. El entonces alcalde socialista, Luis Fernández Gudiña, justificó esta ausencia en que la empresa que promueve este servicio en A Rúa, Repsol Butano SA, apostó por llevar el gas desde las calles adyacentes.
El proyecto causante de este malestar incluyó la renovación de las conducciones de abastecimiento y saneamiento, así como la renovación del asfalto de la calle. El presupuesto fue de 280.000 euros y fue adjudicado a la empresa Hordescon, en un plazo de dos meses. La financiación fue aportada por el Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local, del Ministerio de Política territorial y Administración Pública.
La aparición de defectos antes de que pasase un año desde el final de la obra no es la única polémica que originó la ejecución de este proyecto. Primero fue el retraso en la finalización de unos trabajos que tenían un plazo de ejecución de dos meses, que comenzaron en el mes de junio de 2010 y que en septiembre motivaban las primeras quejas de Avelino García, entonces en la oposición.
Pocos días después de que la maquinaria abandonase la calle, a principios de diciembre del año pasado, la oposición volvió a cuestionar las obras, en esta ocasión por no haber contemplado la colocación de las conducciones de gas propano. El entonces alcalde socialista, Luis Fernández Gudiña, justificó esta ausencia en que la empresa que promueve este servicio en A Rúa, Repsol Butano SA, apostó por llevar el gas desde las calles adyacentes.
