El rival mañana del COB en el Pazo está asentando entre los mejores de la liga por plantilla y por presupuesto y pasa por su mejor momento de la temporada
No es fácil elegir al mejor jugador del Básquet Coruña. Ninguno destaca especialmente sobre el resto en un término medio siempre alto en el nivel de la competición. No es fácil porque todos son muy buenos.
El próximo rival del COB es la antítesis casi perfecta. Un club con la estabilidad por decreto desde que el ourensano Roberto Cibeira llegó a la presidencia, siempre con uno de los mayores presupuestos de la competición (1,2 millones de euros esta temporada), con una plantilla de garantías para pelear con los mejores y con poca presión externa. En una ciudad escandalosamente futbolera y con el Liceo como motivo permanente para presumir, el club de baloncesto trata de meter codo y hacerse un hueco. No lo tiene fácil.
Diego Epifanio es la "apuesta" para tratar de ser ambiciosos hasta el final. Un entrenador de prestigio en la liga y garantía de seriedad. Igual que su equipo. El Básquet Coruña va tacita a tacita en la clasificación y en el juego y empieza a tomar posiciones de cara a un play off de ascenso en el que, seguro, nadie lo querrá como pareja de baile.
Muchas piezas que utilizar Epifanio no tiene estrellas ni rellenos. Todos los jugadores tiene minutos y roles para destacar dentro de un juego sin dependencias. Se lo permite un pareja de bases con puntos (Jakovics y Filipovic) a la que ahora se suma la recuperación del cerebral Álex Hernández. Pau Isern está para lo que haga falta.
Por fuera todos tiran, corren y penetran. Aleix Font da un paso atrás para tratar de volver a la ACB con más argumentos, Lundqvist tiene físico y versatilidad para ser peligroso en las dos posiciones y Barrueta licencia para asumir tiros importantes. Y por dentro igual: Vega y Simeunovic abren el campo, Galán tiene la movilidad, Nwogbo es la referencia en la zona y Diagne pone la presencia física, el rebote y la contundencia.
Un equipo escorado hacia la mitad del campo en la que se tiene el balón en las manos y con más problemas para contener atrás, pero suficientemente equilibrada y con la piezas ya ajustadas para ganar 8 de los 9 últimos partidos y caer solo, y con ovación de la grada visitante como veredicto, ante el líder Palencia.
A más avanza un rival muy complicado para un COB que ya lo sufrió en la ida en un derbi que dejó la herida abierta muchas semanas.
El COB ha mejorado mucho, pero el de enfrente es todavía más complicado.
