EN MEMORIA DE CEFERINO DÍAZ

n n nMe llamó la atención la búsqueda de la identidad socialista de Galicia llevada a cabo por Ceferino Díaz.

Moncho Ramos Requejo. (Maceda)

Publicado: 26 dic 2012 - 08:40 Actualizado: 10 feb 2014 - 23:54

Eran los años de la Transición. En unión con José Manuel Beiras, Luis Bouza Brey y otros compañeros organizaron el Partido Socialista Gallego, pero no tuvieron el respaldo de las urnas. Más tarde, ya dentro de la filas del socialismo oficial (PSOE), intentó a través del catalán Joan Reventós un reconocimiento de las características propias de Galicia, pero los vientos no soplaron favorables. Siguió trabajando hasta el final. Los problemas de las culturas minoritarias no deben, de ninguna manera, quedar dispersos y difuminados en medio de otros tildados de más importantes.

El mejor servicio que podemos hacer hoy a la memoria de Ceferino es retomar su testigo, a pesar de las dificultades e incomprensiones que ello genera. Es una tarea pendiente para los socialistas, y también para los que no lo son, trabajar los conceptos de socialismo en el mundo de la globalización. Saber conjugar el internacionalismo con el nacionalismo, la transparencia política con la intimidad personal y el derecho a la crítica con la lealtad a las personas y a las instituciones. El sectarismo, la parodia y la miseria cultural se han convertido en moneda de uso corriente. Pocos estímulos recibimos los ciudadanos para inclinarnos hacia el rigor en el esfuerzo, hacia la reflexión, hacia la libre elección de los diversos caminos con el respeto a los otros aunque sean diferentes.

Las principales penurias con las que se encontró Ceferino fueron sin duda el sectarismo existente en la sociedad gallega, en el nacionalismo y en el socialismo. La construcción de una sociedad con madurez política requiere comprometerse en los grandes temas sociales y dejar para más tarde otras cuestiones importantes sin duda, pero menos que el derecho a vivir con dignidad en su propio país sin necesidad de emigrar. Él acusó desde siempre la carencia de una educación en libertad para el ejercicio de la libertad. El vacío de una de una tradición humanista, acentuada por el caciquismo y el franquismo rampante, de momento no han podido ser neutralizadas con eficacia en la sociedad. Una de las últimas aportaciones de Ceferino al renacimiento del socialismo es su impulso a una plataforma para su reajuste.

Es de esperar que muchos jóvenes, y no tan jóvenes, se sientan comprometidos por su mensaje. Es difícil imaginar una Galicia próspera sin un socialismo moderno, democrático y respetuoso con las diferentes sensibilidades.

Contenido patrocinado

stats