José Luis Castro de Paz, historiador de cine y catedrático en la USC: “El régimen no fue capaz de borrar del cine las huellas republicanas”
ENTREVISTA A...
José Luis Castro de Paz, historiador de cine y catedrático en la USC, es el próximo protagonista del Foro La Region.
El historiador de cine y catedrático de Comunicación Audiovisual en la Universidad de Santiago de Compostela José Luis Castro de Paz (A Coruña, 1964) desgranará en el próximo Foro La Región los secretos del cine español de posguerra. El historiador sostiene que pese a ser considerado habitualmente un cine franquista sin interés estético alguno, esconde muchos matices e influencias republicanas.
Pregunta.Sin entrar en muchos spoilers de lo que será el Foro La Región, ¿cuáles son esas huellas republicanas en el cine español de posguerra?
Respuesta.En realidad el cine español republicano, fue un cine de gran relación con su público a través de títulos muy exitosos como “Morena Clara” o “La hermana San Sulpicio”. Fue un momento de gran esplendor que obviamente fue sesgado por el inicio de la Guerra Civil. A partir de ahí, lo que se rodó en los años 40 y parte de los 50, salvo los casos de Bardem y Berlanga, fue todo un pestilente celuloide franquista que más valía ni mirar. Empezaron a surgir una serie de tópicos, de que todo era cine propagandístico, de cartón-piedra, que hablaba de los grandes periodos de la historia de España, pero el estudio detenido de esas películas, que otros historiados hemos podido hacer sin los perjuicios y las anteojeras ideológicas de generaciones anteriores, demuestran lo contrario. Como bien dijo el propio Berlanga “mucha gente no se daba cuenta de que las películas de los años 40 bebían del cine republicano”. Y es que estaban dirigidas por los mismos directores, que no se habían exiliado.
P.¿En qué estilo se basaba ese cine?
R.Era un cine basado en obras de teatro populares como sainetes, zarzuelas u obras del género chico. Los protagonistas eran personajes populares como barrenderos, bomberos, agentes de tráfico, gente de las clases sencillas de los barrios populares de Madrid que eran los que habitaban los sainetes teatrales, y ese cine, pese a todo, sobrevivió.
P.¿Y cómo sobrevivió?
R.Sobrevivió porque, a pesar de lo que se cree, a Franco no le interesaba lo más mínimo ese cine. Además, eran obras que tenían un cordón umbilical muy fuerte con el público porque los que iban a las salas de cine eran los hijos y nietos de los que años atrás iban a ver esas obras republicanas. Esa idea de que en los años 40 todas las películas fueron propagandísticas es errónea. Ni siquiera los del propio Régimen se ponían de acuerdo en cómo justificar la guerra. La mayoría de las 422 películas rodadas ese periodo son comedias contemporáneas. películas folclóricas hay poquísimas, porque a Franco no le interesaba nada, pese al tópico, que las películas republicanas presentaran todavía las huellas de una república llena de leandras y de gorras proletarias, como decían con desprecio. Es decir, el cine de los años 40 es muchas cosas, es un laberinto complejísimo, lleno de películas extraordinarias. Evidentemente, claro que hay películas que desde el punto de vista ideológico se acercan al fascismo, pero hay otras muchas que no. De hecho, yo pongo el ejemplo muchas veces, entre lo que ocurre en los años 40 y 50 es el preámbulo de esos sainetes cada vez más oscuros, críticos y tristes, dando lugar en los años 60 a esas películas que llamanos esperpénticas de Berlganga como puede ser “Plácido y Verdugo” o “El extraño viaje”.
P. Si nos vamos al lado del Régimen, Iglesia, Falange, Ejército… todos querrían también su trozo de pastel dentro del cine. ¿Qué parte tuvo más peso?
R.Depende del momento. Hay que tener en cuenta que esta idea de que el Régimen era compacto y todos remaban para el mismo lado, no es cierta. Falange estuvo a punto de matar al ministro del Ejército en la Basílica de Begoña en Bilbao. Es decir, había profundos desacuerdos, había una Falange izquierdista, vamos a decirlo así, revolucionaria, completamente antifranquista. Se dan casos como el de la película “Rojo y Negro”, de claro corte falangista y que es prohibida directamente desde el Palacio del Pardo. Podemos decir que al principio Falange tuvo su peso, pero a medida que va avanzando el tiempo y con el paso de la Segunda Guerra Mundial, Franco va a cambiar de careta y a utilizar la del nacionalcatolicismo. En cada periodo hubo diferentes facciones, pero está claro que el punto de vista que el Régimen pretendía implantar en el cine falló totalmente, pese a lo que se diga. Lo que ellos pretendían era borrar por completo toda la enorme carga populista del cine republicano y no pudieron hacerlo.
P.¿Con qué película se queda de todo ese periodo?
R.Elegiría probablemente tres películas. Primero “Vida en Sombras” de Llorenç Llobet-Gràcia de 1947 que ofrece la visión de las heridas de las películas bélicas en el cerebro del protagonista y como la pérdida de la mujer que se produce en muchísimas películas de esa década es una especie de metáfora de la guerra y de sus huellas. También me gustaría insistir “Domingo de Carnaval” de Edgar Neville, profundamente inspirada además en los cuadros de José Gutiérrez Solana y que es una película moderna y comprometida con la regeneración de España a partir de sólidos elementos culturales como puede ser el flamenco. Y por último colocaría también “Intriga” de Antonio Román.
P.¿Cómo se las apañaban para saltar la censura existente en aquella época?
R.Hay muchas formas de saltarse la censura. Lo que pasaba en ocasiones es que la censura ni se enteraba de lo que iba la película. “Vida en Sombras” es una película tan extraordinariamente compleja y tan particular que para los censores fue imposible entenderla.
P.Ha mencionado a Berlanga, Bardem, Neville… ¿Cuál fue el director que mejor supo retratar la sociedad de ese tiempo?
R.Existen diversas etapas, pero yo creo que el cineasta más relevante de los años 40 por la tradición que recoge de la República y por lo que influye en el cine posterior es el director Edgar Neville.
P.En ese tiempo también se estrenó la película “Raza” escrita por Franco bajo un pseudónimo. ¿Qué opinión le merece?
R.Tengo una enorme consideración por el director de esa película, José Luis Sáenz de Heredia. Pero es una película con un relato absurdo y ridículo que por mucho que haya algún alarde de dirección la película apenas tiene interés quitando el histórico. Si nos centramos en este aspecto sí que es interesante porque de alguna manera saca a relucir el ideario del franquismo.
- FORO: “CINE ESPAÑOL DE POSGUERRA, OTRA LECTURA HISTÓRICA: LAS HUELLAS REPUBLICANAS”
- DÓNDE: SALÓN DE ACTOS AFUNDACIÓN
- CUÁNDO: JUEVES DÍA 22
- HORA: 20,30
Contenido patrocinado
También te puede interesar
RESPUESTAS A LA SOCIEDAD CIVIL
Luis Menor: “Debemos ir cara a mancomunar servizos”
PERSONALIDADES E INVITADOS
Galería | Luis Menor, el presidente de la Diputación de Ourense, en el Foro La Región, en imágenes
Lo último