Malas comunicaciones y escasez de mano de obra lastran a la pizarra

El sector de la pizarra, su importante repercusión en la economía de Valdeorras y sus principales problemas -falta de mano de obra o deficientes comunicaciones- fueron analizados ayer en el Foro La Región “La transformación del sector de la pizarra y su alianza con el rural gallego”. Presentado por el periodista Antonio Nespereira, se desarrolló en el Hotel Monumento Pazo do Castro de O Barco de Valdeorras, interviniendo Severino González, gerente del Clúster de la Pizarra de Galicia; Eduardo Mera, director general de Cupa Group, y Pablo Fernández, director xeral de Planificación Enerxética e Minas. A la cita también acudieron representantes de diferentes concellos de la comarca y del mundo empresarial y laboral de la comarca.

La cita comenzó con la apuesta de la Xunta por el sector de la pizarra que subrayó el director xeral de Planificación Enerxética e Minas, Pablo Fernández, y continuó con un análisis inicial de la situación de un sector que no atraviesa su mejor momento, pues las exportaciones del primer trimestre cayeron un 10 % respecto al mismo periodo del año anterior, cuyo total anual se redujo un 6 % sobre el de 2023. Los datos los dio el director general de Cupa Group, Eduardo Mera, quien abogó por recuperar los volúmenes de exportación anteriores, la puesta en valor de la pizarra respecto a otros productos y la automatización del sector. Severino González, por su parte, aludió a la competencia con otros materiales, señalando la necesidad de “poner en valor la pizarra”.

Comunicaciones

Inmediatamente, salieron a la luz las comunicaciones de la comarca. “Deficiencias en la N-120, la espera por la A-76 y unas conexiones ferroviarias que lastran al sector”, planteó Eduardo Mera, quien recordó que la pizarra viaja al exterior fundamentalmente en camión, por la N-120 hacia Vigo o hacia el Norte de España y Europa. “La N-120 necesita como mínimo una actualización”, dijo, para después explicar que al contratar los portes, las productoras de pizarra deben competir con zonas de mayor facilidad para el transporte. Tras referir la asignatura pendiente del transporte ferroviario, expuso que la A-76 facilitaría los viajes. Las comunicaciones “hacen que nosotros compitamos peor”, añadió.

Severino González aseguró que “tenemos un problema de infraestructuras muy serio” y defendió nuevos carriles entre Alto da Guítara y Os Peares, y desde aquí hasta Ourense. También planteó que la A-76 “va para largo” y señaló la necesidad de un puerto seco para dar salida por tren a la pizarra, sin olvidar de quejarse de la supresión de paradas del Ave en la estación de A Gudiña. “A un empresario no le merece la pena venir en el Ave a Valdeorras”, expuso.

El director xeral, Pablo Fernández coincidió en que las comunicaciones son necesarias y que “Valdeorras tiene una situación un poco precaria” y se quejó de las trabas que plantean ciertos colectivos, como los ecologistas, a la construcción de infraestructuras como la A-76 o la actividad minera. “El día que contemos con una autovía que comunique Ourense con Valdeorras nos preguntaremos cómo pudimos vivir sin ella”, planteó.

Mano de obra

La escasez de mano de obra fue expuesto por el gerente del Clúster, reconociendo el director xeral de Minas que “hay gente que, sin trabajar, obtiene ayudas de las Administraciones y eso no ayuda a que quieran trabajar. Es una tristeza”. Severino González, tras señalar la dificultad de fijar población en el rural, indicó que “la mano de obra del futuro va a proceder de otros países”, estimando en torno al 20 % o 30 % los migrantes de la pizarra. Tras cuantificar en 2.800 los empleos de Cupa Group, Eduardo Mera mostró su preocupación por la mano de obra, asumiendo que las empresas deberán asumir “un coste superior para competir por la mano de obra con otros sectores”.

En O Barco también se habló de la pizarra como el material de construcción más sostenible, que no precisa ningún producto químico y cuyo impacto visual es cada vez menor por la minería de interior. Además, fue abordada la apuesta del sector por la innovación.

Protagonistas

“Hay que retener a los jóvenes en el rural” — Eduardo Mera - Director general de Cupa Group

La importancia del sector de la pizarra para el rural no deja lugar a dudas para el director general de Cupa Group. Eduardo Mera hizo especial hincapié en el papel que juega la mujer en la actividad, estimando que “un 25 % del empleo es femenino”. Seguidamente, añadió que “la incorporación de la mujer continuará” e indicó que la localización de la pizarra permite asegurar que el lugar donde se extrae no variará, consiguiendo que estemos ante ”una actividad que no se puede deslocalizar”.

Ya refiriéndose a la oferta de empleo de la pizarra, fue rotundo: “Aquí hay trabajo”. A continuación indicó que en el grupo empresarial con sede en Sobradelo (Carballeda), “más del 90 % de los empleados tienen contrato indefinido y el 99 % a jornada completa”. Eso sí, incidió en la progresiva despoblación del rural. “Una asignatura pendiente del rural es la retención. Habría que generar un entorno social, de servicios, para retener aquí a esos jóvenes que somos capaces de atraer”.

“El sector contribuyó a fijar población” — Severino González - Gerente del Clúster de la Pizarra

El gerente del Clúster de la Pizarra de Galicia, Severino González, nacido en el pueblo de San Vicente (Vilamartín de Valdeorras), incluye a toda la comarca valdeorresa dentro del mundo rural y lamentó que “si falta algo, falta en el rural. Está muy castigado”. Ya refiriéndose a la importancia de las canteras para frenar el abandono, explicó que “el sector de la pizarra contribuyó y fue efectivo para fijar población”. También subrayó que la actividad económica sufrió un fuerte impulso con la extracción de la pizarra: “Del aprovechamiento de este recurso surgió un sector agroindustrializado”.

Severino González subrayó la importancia “fundamental” de la actividad de las empresas productoras de pizarra para la economía gallega, atribuyendo buena parte de este logro a las generaciones anteriores. “Nuestros antecesores trabajaron mucho” y se logró que en la actualidad se den “unas condiciones que nos permiten vivir con mayores niveles de vida”.

“Tras la pandemia, el rural es apreciado” — Pablo Fernández - Director xeral de Planificación Enerxética e Minas

La visión del rural ofrecida por Eduardo Mera y Severino González no fue compartida en su totalidad por el director xeral de Planificación Enerxética e Minas, Pablo Fernández. En su intervención, indicó que, si bien sigue habiendo problemas en el suministro eléctrico o en la llegada de la fibra óptica, estos cada vez son más puntuales y que, con la pandemia del covid, “la percepción de vivir en el rural cambió. Estamos en un momento en el que el rural es muy apreciado, un momento único”, aseguró. Puso de ejemplo la demanda de viviendas en los pueblos del medio rural.

Sí reconoció que aún es palpable la necesidad de mejorar las comunicaciones, pero insistió en que “es un momento que deben aprovechar las empresas para captar gente”. En este sentido, indicó que se da “un proceso ascendente en la ocupación y repoblación de terrenos”, una circunstancia que se puede percibir en la recuperación de un buen número de parroquias.

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